Ximo Puig aboga por aplicar la ética para encauzar los avances en neurociencia hacia la cura de enfermedades del cerebro
El president de la Generalitat ha participado en la presentación de la Declaración de València sobre ‘neuroderechos’ impulsada por el Consell Valencià de Cultura
Subraya que “es un paso pionero y un avance en la dirección correcta” porque se centra en los avances que desplegarán potenciales efectos positivos
Destaca que la ética “es la frontera para evitar el mercadeo con lo más íntimo e intransferible de nuestra persona: nuestro cerebro”
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha participado en el acto de presentación de la propuesta “Neuroderechos. La Declaración de València”, elaborada por el Consell Valencià de Cultura, en la que se aboga por aplicar la ética para “encauzar” los avances técnicos vinculados con la ciencia que estudia el cerebro y evitar de esta manera que sean utilizados con fines comerciales.
La presentación de esta Declaración, que se ha realizado en el Centro del Carmen Cultura Contemporánea, ha contado también con la participación de la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant; y con la presencia de la consellera de Innovación, y Ciencia, Josefina Bueno.
En su intervención, el jefe del Consell ha invitado a reflexionar y trazar una estrategia global frente a posibles intentos de utilización de la neurociencia para fines impropios, “porque el cerebro debe ser un campo vedado para los fines comerciales”. Para ello, ha insistido, “el mejor invento es la ética”, y en esa línea ha considerado la Declaración de València “un paso pionero y un avance en la dirección correcta”.
Puig ha considerado “esperanzador” el avance de la neurociencia y la neurotecnología en posibles curas de enfermedades relacionadas con la mente, como el alzhéimer, la esquizofrenia o la diversidad funcional, y ha remarcado que la ética “es la frontera para evitar el mercadeo con lo más íntimo e intransferible de nuestra persona: nuestro cerebro”.
Por último, ha destacado que los avances científicos “deben impulsar el avance social”, porque de lo contrario, según ha subrayado, “no serán un avance, sino un retroceso”. En este sentido, ha señalado que “hay que estar vigilantes” antes las consecuencias de los avances técnicos que puedan añadir nuevas brechas a la desigualdad.