Xàbia abre el concurso para adjudicar los chiringuitos y servicios de temporada en las playas para los próximos cuatro veranos
El Ayuntamiento de Xàbia ha abierto hoy el plazo para licitar por los servicios de playa para las temporadas 2018-2021. Salen a subasta cinco chiringuitos distribuidos en el Primer Montañar (uno de ellos lleva asociado alquiler de hamacas) y las hamacas y sombrillas para La Grava, Portitxol y Granadella y el Arenal (en esta última ahora es una licitación única para toda la playa). También se abren dos concesiones náuticas en el Montañar y Arenal.
Los interesados en concursar tienen 15 días naturales para presentar sus propuestas económicas y técnicas en la Oficina de Atención al Ciudadano (a la atención del departamento de Servicios), localizada en las oficinas de la Avenida Amanecer número 2 (de 9 a 14 horas).
El precio de salida para optar a un chiringuito es de 15.000 euros (18.000 euros en el que lleva incluidas hamacas), las sombrillas y hamacas de la Grava salen por 2.500 euros), el padel surf, vela y piraguas en el Montañar por 3.000 euros, el alquiler de patinetes, tablas y piraguas en el Arenal por 15.000 euros, las hamacas y sombrillas en el Arenal por 175.000 euros, las hamacas y sombrillas en Portitxol por 3.000 euros y las de la Granadella por 20.000 euros.
Desde el departamento de Servicios explican que se ha modificado la superficie ocupada por las actividades de hamacas y sombrillas en todas las playas para adecuarla a la ocupación real de los últimos años, y se ha establecido una unidad de medida y distribución para homogeneizar las ocupaciones y evitar montajes inadecuados. También se ha reubicado la zona de hamacas y sombrillas de la playa de la Granadella para evitar el arrastre del mobiliario en caso de lluvias torrenciales, como el ocurrido en agosto de 2017 en la zona.
Otro de los cambios más relevantes realizados en este Plan afecta a los periodos de funcionamiento de todos los servicios, que serán distintos para cada tipo de actividad, y se basa en la experiencia y observación de su funcionamiento en temporadas anteriores, además de eliminar la facultad de los licitadores de solicitar ampliaciones de temporada.