Vila-real eliminará la vieja depuradora de Vora Riu
La antigua depuradora de Vora Riu dejará de funcionar en un plazo aproximado de año y medio, gracias al acuerdo alcanzado por el Ayuntamiento de Vila-real y la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) para la eliminación de la vieja estación depuradora y la derivación de las aguas que hasta ahora se trataban en ella hacia la EDAR de Almassora y la mancomunada de Vila-real, Onda, Betxí y les Alqueries. El concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, ha dado a conocer esta mañana la decisión de suprimir esta depuradora en un proyecto que será asumido íntegramente por la EPSAR y que “no va a costarle, ni directa ni indirectamente, un euro a Vila-real”.
El proyecto, que se prevé aprobar en marzo, supondrá una inversión de 2,7 millones de euros y consiste principalmente en la supresión de la depuradora de Vora Riu y la construcción de dos nuevas estaciones de bombeo –una de ellas en la misma ubicación de la depuradora- y las conducciones necesarias para derivar las aguas hacia las depuradoras de Almassora y la mancomunada. Además, la actuación contempla también la adecuación de colectores actuales para resolver las problemáticas de inundaciones que se producen principalmente en dos puntos del término municipal. “En uno de estos puntos”, puntualiza Obiol, “va a ser necesario expropiar el suelo para el paso de las conducciones, en unas expropiaciones que afectarán a 14 propietarios y que asumirá también la EPSAR, si bien el departamento de Territorio se hará cargo de la gestión”.
“Durante más de 15 años, la depuradora de Vora Riu ha sido foco de controversia política, ambiental económica. Ambiental, porque no reúne las condiciones ambientales necesarias y ha sido fuente de problemas; económica porque supone para el Ayuntamiento un coste anual de 692.000 euros; y política porque se ha planteado en ocasiones el debate entre mejorarla o eliminarla”, señala Obiol. El concejal recuerda, en este sentido, que el anterior ejecutivo municipal presentó un proyecto de “megadepuradora de 12 millones de euros” que tuvo que ser revisado a la baja durante el mismo mandato hasta presentar otro proyecto por la mitad de presupuesto. “Después la EPSAR puso sobre la mesa una tercera vía, la posible eliminación de la vieja depuradora, que data de finales de los años 70. Hemos negociado y valorado las ventajas e inconvenientes de esta opción y hemos decidido suprimirla, eliminando también de esta manera los costes económicos y, sobre todo, ambientales de la vieja estación de Vora Riu”, añade el concejal de Territorio, quien recuerda, además, que este mismo año se ha dado solución también a problemas de olores procedentes de la depuradora que una vecina de Almassora llevó a la Sindicatura de Greuges y que el propio Síndic archivó tras comprobar las medidas correctoras adoptadas.
Obiol ha querido agradecer la colaboración “leal y seria” de la EPSAR para llegar a un acuerdo “firme”. “Estamos a la espera de recibir el proyecto definitivo, pero nos han hecho llegar ya un convenio, que estamos revisando, a falta tan sólo de unos flecos”, indica el edil. En concreto, Obiol se ha referido a la necesidad de que la entidad autonómica asuma la gestión y mantenimiento de los siete puntos de bombeo distribuidos en el término municipal que, con un coste de 30.000 euros anuales, asume en la actualidad la empresa concesionario de la depuradora, cuya concesión expirará con la eliminación de la estación. Por otra parte, el acuerdo garantiza “sobradamente” la capacidad de depuración en el caso de hipotéticos desarrollos futuros y asegura también que la Comunidad de Regantes de Vila-real mantendrá el derecho de aprovechamiento de aguas depuradoras que tiene en la actualidad.
Con un plazo de ejecución de siete meses, el calendario que la EPSAR y el Ayuntamiento de Vila-real manejan para la obra prevé la exposición pública del proyecto entre los meses de abril y mayo, tras lo cual se abrirá el periodo de tramitación ambiental y administrativa durante aproximadamente un año. La previsión es que las obras de supresión de la depuradora de Vora Riu puedan comenzar en mayo del año 2016. “Con este acuerdo, Vila-real no pierde nada; al contrario: gana en capacidad de depuración y gana en calidad ambiental”, concluye Obiol.