Todos los planes, rutas y patrimonio para descubrir Vila-real esta Semana Santa
Descubre la Pascua más espectacular con la fusión de tecnología y pasión religiosa
La Semana Santa de Vila-real es una de las más antiguas de toda la Comunitat Valenciana y ya se tienen referencias de ella desde el año 1546. En la actualidad, la ciudad cuenta con un gran número de cofradías y hermandades y la Semana Santa vila-realense tiene el título de Fiesta de Interés Turístico Provincial.
Razones para ello no le faltan, desde el valor artístico de la imaginería religiosa que desfila cada año en las procesiones del Miércoles Santo o el Santo Entierro hasta la procesión del Silencio o el Encuentro del Domingo de Resurrección. Hoy en día la ciudad continúa esta tradición de siglos, aunque la ha renovado fusionando la pasión religiosa con la innovación tecnológica.
Emociónate con el Laqvima Vere
Así, la ciudad vivirá la Semana Santa más espectacular con el Laqvima Vere, un espectáculo único en España donde se representa la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. Se trata de un espectáculo musical con fuegos artificiales, malabares, equilibrio, teatro de calle y danza en el que participan dos centenares de personas.
Con este acto simbólico la ciudad dará la bienvenida a la Semana Santa, el sábado 9 de abril a las 21:30 horas en la plaza Mayor. Además, este año actuará en Laqvima Vere el soprano Rafa Quirant y el coro de cámara de la Universidad Autónoma de Madrid.
Descubre sus parajes naturales en primavera
La Semana Santa y la llegada de la primavera son un momento perfecto para conocer Vila-real, sus parajes naturales y su rica gastronomía, basada en los productos de la tierra y los arroces. Situada en la orilla del río Mijares, Vila-real ofrece al visitante rutas para pasear por sus espacios verdes.
La joya de la corona es el Termet de la Mare de Déu de Gràcia, un bosque de pinos nacido en un meandro excavado por el río, donde podemos encontrar varias rutas de senderismo, realizar todo tipo de actividades deportivas o disfrutar de su patrimonio, como la ermita de la Virgen de Gracia y su museo etnológico.
Otra opción es pasear por el Paisaje Protegido de la Desembocadura del Mijares, que tiene abiertas rutas para hacer senderismo o bicicleta desde el puente de Santa Quiteria hasta la desembocadura en el Mediterráneo. Un paraje lleno de vegetación y fauna, con especial protagonismo a todos los tipos de aves acuáticas que anidan en la zona.
Además, Vila-real está rodeado de un enorme patrimonio dejado por los árabes como es el sistema de acequias y canales de riego, o los antiguos molinos y almacenes de naranjas como el antiguo almacén modernista de Cabrera, símbolo de la pujanza económica de los cítricos a finales del siglo XIX y principios del XX. Todo un pasado agrícola que también se puede visitar, ya sea a pie o en bicicleta, por los huertos que abrazan el este del municipio.
Recorre una ciudad con 700 años de historia
La ciudad de Vila-real fue fundada por el rey Jaime I a partir de un trozo del término de Burriana. Nacida en 1274, la urbe suma ya más de 700 años de historia, que han dejado su huella en las calles y su rico patrimonio histórico y cultural.
Del periodo de su fundación se conservan la plaza porticada de La Vila, el puente sobre el río Mijares y varios segmentos de las murallas, como la emblemática Torre Motxa. Desde la Oficina de Turismo parte la ruta urbana para conocer los principales edificios de la ciudad, y descubrir así la antigua villa medieval y sus arrabales.
Así, se pueden descubrir tesoros como la basílica de San Pascual, la Casa de Polo, el Gran Casino, el Hostal del Rey, la Iglesia Arciprestal San Jaime, la Capilla del Cristo del Hospital o el Convento del Carmen.
Además, Vila-real ofrece al visitante numerosos atractivos culturales, como el Museo de la Ciudad, en la Casa Polo, el Museo del Pouet del Sant, en la Basílica; el Museo Etnológico, en la ermita del Termet o el Espai d’Art El Convent.