Las lluvias causan una docena de avisos
Los 157 litros por metro cuadrado registrados en Vila-real en 24 horas han provocado algunos problemas en algunas calles y caminos, así como en edificios privados, que han requerido una docena de intervenciones de cubas para el achique de agua en bajos y sótanos. Sin embargo, pese a la cantidad de lluvia, la situación estaba controlada a primera hora de la mañana, con lo que el concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde, ha hecho un balance “moderadamente positivo” teniendo en cuenta la importancia del episodio de lluvias. “Es cierto que hemos tenido algunos problemas, pero el sistema de alcantarillado, que mantenemos limpio durante todo el año, ha funcionado perfectamente y las situaciones más problemáticas se han producido en la zona baja del municipio, donde el anterior equipo de gobierno olvidó acometer la construcción de un colector que evitaría este tipo de situaciones”, señala Valverde, quien, junto al alcalde, José Benlloch, supervisó anoche los trabajos de la Policía Local y SPV para hacer frente a los efectos de las lluvias.
En esta línea, el edil señala que el equipo de gobierno está trabajando ya desde hace tiempo en la elaboración de un plan director, que establezca las infraestructuras necesarias y sus posibles costes “Si estamos haciendo este plan director es porque, cuando llegamos, no estaba hecho, porque el Partido Popular primó proyectos más electoralistas como las bibliotecas sin libros o un cementerio nuevo que no es más que un solar, en lugar de construir el colector que necesita la ciudad en esa zona”, lamenta el concejal de Servicios Públicos. En esta línea, el edil avanza que, debido a la envergadura de esta obra, “va a ser necesaria la colaboración de las administraciones superiores” para poder ejecutarla.
En referencia al reciente episodio de lluvias torrenciales, Valverde lamenta también que el deficiente mantenimiento de los cauces por parte “de quien tiene la responsabilidad y la competencia, que es la Confederación Hidrográfica del Júcar” ha causado algunos problemas e inundaciones en caminos rurales como el Camí Bellot, en el barranco de Ràtils. En otros puntos, como el final del Barranquet en el paso de la vía del tren, “hace relativamente poco tiempo estaba absolutamente cegado por escombros y la delegación de Servicios Públicos Vila-real lo limpió, por lo que no hay ni una caña y ha funcionado perfectamente”.
En concreto, las lluvias provocaron en la noche de ayer una docena de avisos de domicilios particulares y problemas en dos edificios municipales (Centro Social y Espai Jove), así como inundaciones en las calles Santa Quiteria, Michalovce y La Plana. El agua obligó a cortar media docena de calles, entre ellas la entrada norte a Vila-real, la avenida Francia en su cruce con el Cedre o el paso subterráneo de la calle Furs de València, que sigue cortado al tráfico. También se han mantenido cerrados esta mañana el camino de acceso a la ITV, caminos rurales de acceso al barranco de Ràtils y uno de los arcenes de la carretera de Onda, donde se circula prácticamente con normalidad.
