Folgado: “Los alcaldes deben ser la voz de la mayoría de los ciudadanos, no la representación de los que más griten”
El dirigente del Partido Popular de la provincia de Castellón reclama que “si de verdad se quiere respetar a los ciudadanos y ser un ejemplo democrático, deberían respetarse las mayoría, esa es la esencia de la democracia”
El dirigente del comité provincial del PP en Castellón, Héctor Folgado, ha lamentado que “de nuevo, cuando se habla de reforma electoral en España no se haga en clave constructiva y de estabilidad, sino que los partidos de la izquierda se dediquen a hacer cábalas para ver con cuantos votos dispersos son capaces de conseguir los sillones de las alcaldías. Mientras el PP, con programas de gobierno fuertes y firmes, consigue la mayoría de los votos, el PSOE, en lugar de preparar propuestas que den aliciente a los ciudadanos para confiar, lo único que hace es sumar grupúsculos y hacer álgebra para intentar afincarse en el poder de los municipios”.
Folgado, que es también portavoz del PP en Vila-real, en la oposición a pesar de haber sumado más de 43% de los votos en las últimas elecciones, ha señalado que “ellos, en estos momentos, prefieren reproducir lo que pasó en las últimas elecciones en Vila-real. PSOE, Bloc, Iniciativa y Esquerra Unida, a puerta cerrada al día siguiente de las elecciones, cuando vieron que habían perdido las elecciones, se reunieron de espaldas al pueblo y de espaldas a lo que se habían comprometido con sus votantes y pactaron un nuevo programa y los sueldos que iban a cobrar durante toda la legislatura”.
Por eso, el dirigente del PPCS critica que el alcalde socialista de Vila-real, José Benlloch, “sea capaz de apelar a voluntad de la mayoría social, cuando la realidad es que el 43% de los vila-realenses querían un alcalde del PP y no llegaban ni siquiera al 29% los que apostaron por él”.
“En España los partidos de la izquierda han cambiado de objetivo, ahora no intentan tener un programa de alternativa de gobierno, sino que centran su política simplemente en el rechazo al PP y eso lo único que genera es gobernantes sin criterio, alcaldías donde no existe un plan de mandato estable para el municipio y políticas que marginan a la mitad de la población, ha señalado Héctor Folgado quien ha recordado que “en Vila-real por ejemplo, han tenido que unirse hasta cuatro partidos que lo único que tienen en común es que son de izquierda y que se oponen al PP, para gobernar sobre una mayoría del 43% de los votos que decidió democráticamente en las urnas que, quien quería que gobernara fuera un partido conservador y sensato”.
“Los multipartitos de izquierda son extremistas y dejan mucho que desear”
Por este motivo, ha seguido Folgado “la política que se está desarrollando con un cuatripartito deja mucho que desear: mociones extremistas que se prueban por chantaje entre socios, decisiones que se desmiembran porque los socios no se ponen de acuerdo, en definitiva, ayuntamientos con una gobernabilidad en la cuerda floja, donde pesa más el interés partidista que la voluntad de los ciudadanos”.
La democracia está dando pasos hacia atrás, ha sentenciado Folgado, en Vila-real lo sabemos bien “aquí somos un pueblo que nos gusta el fútbol y sabemos que los partidos se juegan y se ganan o se pierden en el campo y no en los despachos. Eso es juego sucio y falta de transparencia y solo quien no confía en sus posibilidad y a quien no le importan los ciudadanos es capaz de anteponer sus ansias por gobernar a la decisión de las urnas”.
“Evidentemente, quienes jamás estarán a favor de esta reforma es quienes saben que nunca, con su programa político podrían conseguir el apoyo ciudadano, los micropartidos extremistas y con programas radicales, pero lo más lamentable es que el PSOE, que ya llevaba en su propio programa esta reforma, ahora quiera valerse de estas artimañas con tal de conseguir el poder”, ha concluido Folgado.