Compromís propone la adquisición de los terrenos de la Fundación Dolores García

El colectivo de Compromís per Vila-real considera necesaria una negociación con las entidades acreedoras por parte del Ayuntamiento para adquirir los terrenos de la Fundación Dolores García antes de que salgan a subasta.
El objetivo, además de preservar la función social de las instalaciones, de las que hacen uso los alumnos del Centro de Educación Especial (CEE) La Panderola, es salvaguardar los derechos legales de la Fundación Dolores García y conseguir un nuevo terreno completamente municipal, que sería ideal para la construcción del nuevo pabellón Campió Llorens.

La militancia de Compromís per Vila-real opina que una subasta al mejor postor de estos terrenos perjudicaría a los jóvenes con diversidad funcional que hasta hace poco hacían uso de las pistas de pádel. Asimismo, proponen el Ayuntamiento que el nuevo polideportivo se ubique en este solar, más accesible, con metros cuadrados más que suficientes como para garantizar un recinto de igual o mayores características que el proyectado y, lo más importante, en terrenos que serían totalmente municipales y que se encuentran justo frente al colegio Virgen del Carmen, que tendrían el edificio a poco más de 10 metros.

Las dudas del colectivo local sobre construir un nuevo pabellón en terrenos cedidos por la orden de los Carmelitas ya quedaron patentes hace unos meses, cuando la militancia expuso públicamente que este acuerdo iría en detrimento tanto de los usuarios del pabellón como de los alumnos del colegio.

Para Compromís per Vila-real, una inversión de estas características, aunque la realice el Villarreal CF, no puede ser fruto de una ocurrencia de última hora para que los vecinos vean algo inaugurado antes de las elecciones.
Por otro lado, el colectivo local rechaza las afirmaciones vertidas sobre sus miembros, que les acusan de oponerse a que los alumnos del colegio Virgen del Carmen dispongan de un polideportivo. Rotundamente falso. Lo que en ningún momento quiere la militancia de Compromís es que los usuarios del antiguo pabellón vean reducidas drásticamente las horas y actividades ofertadas al entrar en conflicto con el horario lectivo. Esta situación sólo puede acabar con un conflicto que perjudicará a todas las partes. Y visto que no es viable, el colectivo prefiere evitar cualquier inconveniente, proponiendo soluciones para racionales y pensadas para los más de 51.000 habitantes de la ciudad y no para unos pocos.

Los miembros de Compromís per Vila-real son conscientes de que la situación no es fácil, pero consideran que, además de dotar de un pabellón de uso 100% municipal como el que se ha eliminado, se rescatarían unos terrenos y unas instalaciones que hacen, y seguirían haciendo, una labor social muy necesaria.