Compromís exige al Gobierno que transfiera las competencias de los servicios de Cercanías a la Generalitat

El grupo municipal de Compromís per Vila-real ha presentado una moción al pleno del próximo martes para solicitar al Gobierno central que transfiera los servicios de Cercanías a la Generalitat Valenciana. El principal motivo es el colapso constante del servicio y la falta de inversiones por parte del Ministerio de Fomento.

Tanto Renfe, como operadora y Adif como administrador de la infraestructura de los servicios ferroviarios de cercanías son empresas públicas dependientes del Ministerio y, por lo tanto, el funcionamiento es competencia exclusiva de la Administración central, que "a día de hoy, no ha licitado ninguna de las grandes actuaciones previstas para nuestro territorio", lamentan desde Compromís.

"Actualmente, la situación de las infraestructuras en el País Valencià, especialmente de la red ferroviaria y de los trenes de Cercanías -algo que afecta de lleno a Vila-real- es de colapso", indican, "y el listado de agravios y de compromisos incumplidos es interminable, gobierne quien gobierne".

Así, recuerdan el convenio firmado en 2010 entre el Gobierno central y el Consell para activar el Plan de Cercanías 2010-2020, que preveía invertir 3.400 millones de euros para la construcción de infraestructuras, así como para la modernización, mejora y adecuación de estaciones. También entraba en el acuerdo el tren de la costa Dénia-Alacant, las mejoras y la adecuación de la línea Xàtiva-Alcoi, las nuevas estaciones prometidas, la aceleración de las obras del tercer carril entre València y Castelló, la ampliación del servicio de Cercanías entre Castelló y Vinaròs y Villena o la aceleración de la redacción de estudios y proyectos del tren de la costa, especialmente del tramo Gandia-Oliva. La mejora de los servicios entre Alacant y Múrcia, la eliminación del actual transbordo en Sant Isidre, la electrificación de la vía de Sant Isidre a Alacant, la puesta en funcionamiento de la conexión de la línea C-3 entre la Font de Sant Lluís y València Nord para todas las circulaciones y, por último, la puesta en funcionamiento de la línea C-3 hasta Utiel.

"Tras la aprobación de los Presupuestos del Estado 2018, lo que podemos observar es que no se han cumplido los compromisos que adquirió públicamente el Ministerio de Fomento y que las actuaciones anunciadas en nuestro territorio no se reflejan en las cuentas", afirman y lamentan que "volvemos a estar discriminados por el Gobierno del Estado español". Asimismo, critican que a única actuación realizada ha sido el aumento de frecuencias de la línea Castelló-Vinaròs, "que ni es un servicio de Cercanías, por lo que cuesta más caro, ni está adaptada a personas con movilidad reducida, por lo que entendemos que para el Gobierno estos usuarios son invisibles".

Por no hablar del Corredor Mediterráneo, que "una vez más, se queda fuera sin tener en cuenta lo que implica para la competitividad de nuestras empresas y las del arco mediterráneo, donde se concentran más de la mitad de todas las exportaciones del Estado". "Nuestro territorio sufre problemas de infrafinanciación y de infrainversión en las infraestructuras desde hace años, lo que afecta directamente al transporte metropolitano, dejando así un servicio poco eficiente y de baja calidad, que además ha ido empeorando en los últimos cuatro años", aseguran.

"Llegados a este punto, no podemos depender del Gobierno central y debemos acabar con la mala gestión y con la falta de inversiones en nuestro territorio", indican, "necesitamos una solución a nuestra falta de inversiones, ya que somos la tercera comunidad autónoma con más tráfico de pasajeros y de mercancías".

Por este motivo, Compromís insta a la Generalitat Valenciana a iniciar las gestiones necesarias con el Gobierno central para conseguir la transferencia de competencias de los servicios ferroviarios de Cercanías, según dispone el artículo 49.15 del Estatut d'autonomia, de acuerdo con el artículo 149.21 de la Constitución española. Asimismo, se solicita al Gobierno central que realice todas las inversiones necesarias para poder asumir estas competencias antes de que se produzca la transferencia y acompañarla con la financiación anual necesaria para poder gestionar y mantenerlas correctamente y que sea la Generalitat quien pueda dar cumplimiento a los compromisos y a las inversiones pendientes en nuestro territorio.

Finalmente, en el texto se le pide a Renfe la adopción de una política de precios extraordinarios para paliar las deficiencias del servicio de transporte de viajeros, que debería concentrarse en la bonificación de al menos el 50% del billete.