Benlloch (Vila-real): "Os deseo una Navidad en compañía de los vuestros sin abandonar la prudencia a la que nos obliga la pandemia"

Cerramos un año marcado, de nuevo, por la pandemia. Ha sido muy duro a muchos niveles, también para las instituciones más cercanas a los ciudadanos, los ayuntamientos, que han tenido que enfrentarse a situaciones complicadas a las que nunca se habían enfrentado. Pero, al margen de la pandemia, los consistorios han seguido gestionando otros asuntos que afectan a los vecinos de a pie como es el ayuntamiento de Vila-real.

En esta entrevista con el alcalde de Vila-real, José Benlloch, hacemos balance de la gestión municipal este 2021 así como los retos que afronta para el próximo ejercicio, como seguir apoyando a los sectores más afectados por la pandemia o los planes para el desarrollo industrial y agrícola de la localidad.

Llevamos casi dos años de pandemia, ¿cómo ha sido la gestión realizada desde el Ayuntamiento de Vila-real? ¿Cómo la definiría?

La gestión de la pandemia ha sido, a todos los niveles, muy dura. En lo personal, porque hemos tenido que vivir situaciones complicadísimas en las que, como alcalde, me he involucrado personalmente, por ejemplo con la situación que se vivió en el inicio de la pandemia en la residencia de mayores Virgen de Gracia. En lo social, ha reclamado un esfuerzo enorme de toda la ciudadanía, que ha demostrado de nuevo ser una sociedad ejemplar. También en lo económico, porque la crisis sanitaria ha tenido un impacto gravísimo en nuestro tejido socioeconómico, que desde el Ayuntamiento hemos tratado de amortiguar con medidas de dinamización y ayudas directas o indirectas a nuestras empresas que nos han supuesto un impacto de más de 4,5 millones de euros imprevistos. Y, por supuesto, en el ámbito sanitario, donde nos hemos puesto desde el primer día a disposición de las autoridades en todo aquello que hemos podido, como el reparto de mascarillas, la cesión del CTD como hospital auxiliar, el albergue para el alojamiento de temporeros o el Centro de Congresos como punto de vacunación de referencia en la comarca.

Echando la vista atrás, aquellos primeros días de confinamiento, con la incertidumbre sobre cómo iba a afectar el virus y con las personas que nos han ido dejando por la pandemia, ¿cómo recuerda aquellos días como alcalde? ¿Cuál fue su misión entonces y su día a día?

Como le decía, ha sido durísimo. Un Ayuntamiento es la institución más cercana que tienen nuestros vecinos; a la que acuden primero cuando tienen algún problema o necesidad. Y tenemos la obligación de responder, desde la proximidad, aunque no tengamos competencias o recursos. En una situación de incertezas como la que hemos vivido, particularmente en los primeros momentos del confinamiento, cuando la ciudadanía más necesitada estaba de respuestas que las autoridades tampoco teníamos, la misión de un alcalde o alcaldesa no puede ser otra que la de tratar de mantener la serenidad y dar seguridad a la ciudadanía. En contacto continuo con las autoridades sanitarias, recibiendo y trasladando información necesaria para hacer frente al virus, poniendo todos nuestros recursos a disposición de las autoridades y los vecinos para responder en el menor tiempo posible, de la mejor manera posible y de forma coordinada a las nuevas incógnitas que se iban abriendo. Para ello, hemos contado siempre con nuestras entidades sociales, con las que reforzamos nuestra alianza con 100.000 euros adicionales, y con una sociedad civil implicada y comprometida que se volcó desde el primer momento en ayudar, con iniciativas como la red de voluntariado. 

Habla siempre de los “empastres del PP”, ¿podría cuantificar a cuánto ascienden?

Lamentablemente, a día de hoy, no es posible saber cuánto nos puede costar la herencia que dejó el Partido Popular a la ciudad de Vila-real, porque son muchos los pleitos todavía abiertos y el riesgo que supone para la ciudad la gestión urbanística que practicó el PP, principalmente en sus últimos años, vendiendo parcelas en la luna que no se pueden materializar. Un estudio externo que encargamos en el 2016 llegó a cuantificar el riesgo de los aprovechamientos urbanísticos en 231 millones. Sí le puedo decir que, en breve, anunciaremos nuevas medidas de transparencia a este respecto, para que la gente pueda conocer qué ha supuesto la gestión del pasado en estos últimos 10 años, con el pago de sentencias, convenios y otros empastres que nos dejó el PP por valor de más de 33 millones de euros.

¿Qué ha tenido que dejar de hacer su gobierno por ello?

Tantas cosas que no sabría por dónde empezar. Imagínese todo lo que se puede hacer con 33 millones de euros. El presupuesto de una ciudad como Onda es incluso menor a lo que llevamos pagado en herencia urbanística del PP en Vila-real. Para empezar, no habría sido necesario incrementar el IBI. Pero creo que lo importante es que, a pesar de todo, hemos conseguido que esta herencia no nos paralice. Con muchísimo esfuerzo, y gracias a una sociedad dinámica y avanzada, Vila-real es hoy una ciudad más preparada para afrontar los retos del futuro. Una ciudad que se mueve, renace y avanza de nuevo.

Hace poco comunicaban que unas nuevas resoluciones urbanísticas del PP obligarán a incluir el pago de 840.000 euros en las cuentas de 2022. ¿Prevén más sentencias de estas características?

Me gustaría poder decirle que no, que esto ya se ha acabado, pero no es así. Como le decía, tenemos abiertos muchos procesos todavía por la gestión urbanística que hizo el PP en el pasado, algunos muy gravosos para la ciudad, como parte del jardín de Jaume I o la prolongación de la avenida de Francia, a las que se refieren también las sentencia por las que me pregunta.

¿Qué supone para un alcalde gobernar con esta incertidumbre?

Sobre todo, supone la autoexigencia de un plus de responsabilidad y de prudencia a la hora de gestionar la ciudad, y también, por qué no decirlo, la frustración por tener que estar dedicando tantos esfuerzos, personales y económicos, para gestionar el pasado; esfuerzos que podríamos estar invirtiendo en mejorar la vida de las personas en Vila-real y en seguir avanzando en la ciudad moderna, inclusiva i dinámica que queremos ser. Debemos gestionar con mucha prudencia y haciendo constantemente equilibrios para pagar la herencia del pasado y defender el interés general de Vila-real, conteniendo lo máximo posible el endeudamiento, sin dejar de atender las necesidades y la prestación de servicios a la ciudadanía y sentando también las bases de esta nueva Vila-real del siglo XXI. 

¿Qué medidas tiene previstas ejecutar en 2022 en apoyo a la hostelería, la restauración y el comercio en un momento tan complicado por la pandemia?

En el año 2022, vamos a mantener la Mesa del Pacto Local por el Renacimiento de Vila-real, una iniciativa de la que me siento particularmente orgulloso porque supone remar todos juntos por la reactivación de Vila-real, con el acuerdo de todos los grupos políticos con representación municipal. En el marco de esa Mesa, iremos adoptando medidas de reactivación económica que beneficiarán a nuestras empresas, como hemos venido haciendo en estos dos últimos años. También mantendremos la ampliación de terrazas sin mayor coste y, al menos durante los primeros meses, se mantendrá la exoneración de las tasas de terrazas, que nos ha supuesto ya dejar de ingresar 360.000 euros, además de la eliminación de la tasa de actividades que ya aprobamos hace unas semanas. En lo que llevamos de pandemia, no hemos escatimado esfuerzos para ayudar a nuestros comercios y hostelería, con ayudas directas e indirectas, algunas de ellas pioneras, como la bonificación del 95% del IBI o la tarjeta Fem Poble, en colaboración con la Fundación Caixa Rural Vila-real. En esta línea vamos a seguir trabajando.

Vila-real es un municipio industrial y “llaurador”. ¿Qué planes han desarrollado y prevén en lo que queda de legislatura para apoyar a estos dos tejidos productivos locales?

En el ámbito industrial, seguiremos desarrollando el Plan de reindustrialización local, para el que contamos con la financiación del Ivace y en el que hemos invertido ya 3,2 millones de euros en la mejora de nuestros polígonos. Pero, sin duda, el gran proyecto tractor de la industria va a ser el desbloqueo del PAI industrial del clúster de la innovación cerámica, en la carretera de Onda, donde vamos a definir un polígono del siglo XXI más sostenible y eficiente, en un proyecto de más de 44 millones de euros. La ronda Suroeste, que tenemos ya prácticamente acabada, también supondrá un importante impulso a nuestra industria. Por otra parte, no dejamos nunca de lado nuestro apoyo a la agricultura, el sector de donde venimos y que nos lo ha dado todo. Por ejemplo, con el impulso de un clúster agroalimentario en uno de los polígonos en los que estamos actuando junto al Ivace, en el entorno de la estación, o también con la cesión de suelo a la Generalitat para la conversión del antiguo centro de capacitación agraria en un centro de referencia para la investigación agrícola, sin dejar de colaborar con nuestras entidades en nuevos proyectos que mejoren la rentabilidad de nuestros cultivos y permitan hacer frente a las nuevas plagas, como el insectario de la Cooperativa Católico-Agraria contra el cotonet. En definitiva, seguir apoyando a nuestra industria y nuestra agricultura, colaborando con otras administraciones, con el sector privado y con nuestras entidades, para modernizar nuestros sectores económicos y caminar hacia modelos más sostenibles, eficientes y competitivos.

El PSPV-PSOE se encuentra actualmente en un proceso de renovación interna y usted se ha posicionado con la candidatura de Samuel Falomir. ¿Qué puede aportar el alcalde de l’Alcora a la agrupación provincial en estos momentos en que el PSOE cuenta con los principales gobiernos de Castellón?

Samuel Falomir es un alcalde joven, que conoce como funciona un ayuntamiento, que ha recibido el apoyo de su pueblo, con una visión fresca de la política y del Partido Socialista. Lo que necesita nuestro partido en el ámbito provincial es, precisamente, eso: más y mejor municipalismo. Es lo que yo mismo propuse en 2017 y creo que es lo que representa la opción de Samu, sin desmerecer lo que puedan aportar otros compañeros.

Para finalizar, unas palabras para felicitar la Navidad y el Año Nuevo 2022.

A todos los lectores de elperiodic.com les deseo unas Navidades en compañía de los suyos, sin abandonar nunca la responsabilidad y la prudencia a las que nos obliga la situación de pandemia. Y que el nuevo año traiga para todos prosperidad e ilusión para afrontar los nuevos retos que nos depare la vida. Feliz Navidad y muy feliz 2022.