Benlloch lamenta que el Gobierno obligue a “inutilizar” la paga extra de los funcionarios y tratará de evitar su eliminación

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha lamentado hoy que el Gobierno central obligue al consistorio a “inmovilizar” los 700.000 euros correspondientes a las pagas extraordinarias de Navidad de los funcionarios y personal del Ayuntamiento y ha explicado que la decisión de eliminar estas pagas “se retrasará en Vila-real lo máximo posible para seguir estudiando otras opciones que permitan que los empleados públicos reciban sus retribuciones”. Benlloch se ha mostrado radicalmente en contra de esta medida impuesta por el Gobierno central que, señala, “forma parte de la campaña brutal de desprestigio hacia la función pública con la única finalidad de rescatar a los bancos, arruinar el país y sembrar el miedo en la ciudadanía”.

“Más de dos tercios de los funcionarios de este país se dedican a cuidar de nuestra salud, de nuestra formación y de nuestra seguridad”, ha valorado Benlloch, quien recuerda que los empleados de la Administración llevan ya muchos años sin actualizar al IPC sus salarios y han sufrido ya recortes en sus retribuciones. “Esto se une a la brutal subida del IRPF aprobada por Rajoy y otra subida ahora en el IVA que ha encarecido los servicios esenciales al ciudadano”, añade. “Con todos estos recortes es imposible que superemos la situación, porque es como si a un enfermo se le fuera quitando el medicamento, el suero y el oxígeno”, concluye. En esta línea, advierte el primer edil, “los comerciantes de Vila-real ya nos están haciendo llegar su preocupación porque ven que la de este año será una campaña de Navidad muy complicada, ya que el colectivo de funcionarios ofrecía una cierta seguridad y estabilidad para el consumo”.

A estas consideraciones se suma el hecho de que el Ejecutivo central no ha aclarado todavía el destino de las retribuciones. “La información del Gobierno indica que el dinero de las pagas debe ir destinado a planes de pensiones o contratos de seguro colectivo, pero en aquellos ayuntamientos en los que, como es el caso de Vila-real, no existen planes de pensiones nos obligan a crear una partida no disponible que, en la práctica, supone la obligatoriedad de inmovilizar 700.000 euros, que los ciudadanos de Vila-real no podrán utilizar para nada”, argumenta Benlloch, quien lamenta que “no se destine el dinero a ayudar a las familias y vayan a planes de pensiones que no benefician a nadie ahora”. “Qué sentido tiene que, cuando no podemos dar ayudas de emergencia porque la Generalitat no nos paga, cuando tenemos que estar haciendo frente a gastos que corresponden al Consell, que nos debe 10 millones de euros, el Gobierno nos obligue a inutilizar 700.000 euros”, denuncia el alcalde, que pedirá por escrito al Ministerio “que nos aclare a qué se deberá destinar este dinero”.

Por todos estos motivos, el equipo de gobierno ha intentado “en todo momento” no aplicar la medida, aunque esta semana, indica el alcalde, se ha recibido en el Ayuntamiento una nota informativa que “obliga a todos los municipios a cumplir con la orden”. En todo caso, insiste, “vamos a retrasar todo lo que podamos la decisión y estudiar todas las posibilidades para no tener que aplicarla”. En cuanto a las pagas extraordinarias de los cargos públicos, puntualiza Benlloch, “evidentemente” también se renunciará a ellas.

Por otra parte, Benlloch ha anunciado que en octubre entrará en vigor el incremento de 175 horas anuales de trabajo a los funcionarios locales aprobado por el Ayuntamiento, lo que supondrá para cada empleado municipal “media hora diaria más de trabajo por el mismo salario, que redundará, esta vez sí, en la mejora del servicio a los ciudadanos”.