Benlloch anuncia la revisión de las normas urbanísticas del PGOU para adaptarlas a la planificación de la Vila-real del 2030

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha anunciado una “revisión profunda e integral” de las normas urbanísticas del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1993 con el objetivo de adaptar la normativa urbanística de la ciudad “a las necesidades de la Vila-real del 2030” y “dar respuesta a una ciudad que avanza muy rápido en iniciativas sociales y empresariales”. El primer edil ha hecho este anuncio después de la reunión de trabajo que ha mantenido con los técnicos y responsables de la Concejalía de Territorio, junto al edil del área, Emilio M. Obiol, dentro del Plan de proximidad de servicios administrativos que está llevando a cabo Benlloch en las últimas semanas.

“En los últimos años hemos ido dando respuesta a los avances de esta ciudad y los proyectos que desde la iniciativa privada se nos planteaban y que considerábamos interesantes para el desarrollo del municipio, a través de modificaciones puntuales de estas normas”, ha apuntado el alcalde, quien ha puesto como ejemplos los cambios para permitir la construcción de naves industriales de mayor altura, la adaptación de la normativa de ruido a la legislación autonómica, o la modificación para permitir la instalación de una empresa de producción de champiñones aprobada esta misma semana en pleno.

“Estas actuaciones puntuales han sido necesarias, y se han hecho cumpliendo todos los requisitos legales, pero con la revisión de las normas urbanísticas queremos ir un paso por delante de la iniciativa privada, para adelantarnos a sus necesidades, y sobre todo crear oportunidades de desarrollo”, ha matizado el alcalde, quien ha reivindicado la apuesta del equipo de gobierno por la colaboración público-privada como un modelo que ha propiciado el crecimiento de la ciudad.

Por ello, el primer edil ha encargado a los técnicos del área de Territorio un “estudio y diagnóstico de todos aquellos aspectos que están desactualizados” con el fin de “saber qué es necesario modificar teniendo como meta la Vila-real de la próxima década”. La previsión es que este trabajo pueda estar finalizado en el plazo de dos o tres meses, para después someterse a la aprobación del pleno.

Benlloch ha recordado que el departamento de Territorio ya realizó en su día “un compendio de todas las normas urbanísticas, que ha resultado ser de mucha utilidad” y que se ha desarrollado también a través de las nuevas tecnologías con la creación del Servicio de Información Territorial, una herramienta que “ha despertado interés incluso por parte de otros ayuntamientos”.

El alcalde ha agradecido el trabajo de los técnicos del área de Territorio y ha destacado la importancia transversal de esta Concejalía en el Ayuntamiento, puesto que “no sólo atiende el día a día sino que también tiene que ayudarnos a planificar la ciudad del 2030”. “En la próxima década, Vila-real se juega mucho, se juega ser una ciudad moderna y prestadora de servicios con capacidad de competir en el mundo”, ha recordado. 

El concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, ha destacado que la jornada de trabajo ha sido muy provechosa y ha recordado que a final de año se realizará una nueva sesión para “seguir avanzando en la planificación de la gestión pública para que seamos un ayuntamiento más útil y que preste un mejor servicio a la ciudad”.