El PP de Valencia reclama que el Ayuntamiento no ampliará el número de cámaras para vigilar el patrimonio histórico protegido de la ciudad
La propuesta del PP de ampliar la protección de nuestro patrimonio fue rechazada por los votos de Compromís y PSOE
Los populares también pedían retirar de inmediato los carteles instalados en las fachadas de los monumentos BIC adscritos a dicha delegación, en cumplimiento de la Ley 4/1998, del Patrimonio Cultural Valenciano
El PP pedía instar al equipo de gobierno municipal a aprobar, a la mayor brevedad posible, un plan especial de lucha contra el vandalismo
El Gobierno de Ribó y PSOE no ampliará el sistema de cámaras para proteger el patrimonio histórico y cultural de la ciudad como pedía en una moción del Grupo Municipal Popular. La propuesta del PP era instalar, de manera progresiva y escalonada en el tiempo, cámaras de vigilancia en el resto de monumentos y edificios protegidos de titularidad municipal existentes en la ciudad.
La concejala del Grupo Popular, Julia Climent, ha advertido que la iniciativa “es fundamental para evitar actos vandálicos y el deterioro de edificios y monumentos protegidos de titularidad municipal. Ya se ha hecho para algunos edificios y el resultado es positivo pues se evitarían daños que en muchos casos podrían ser irreparables. Por ello, no entendemos la oposición del Gobierno a nuestra moción”.
La moción también pedía a la concejalía de Patrimonio y Recursos Culturales que “se proceda a retirar de inmediato los carteles instalados en las fachadas de los monumentos BIC adscritos a dicha delegación, en cumplimiento de la Ley 4/1998, del Patrimonio Cultural Valenciano, reubicándolos en sus inmediaciones”.
Y por último “instar al equipo de gobierno municipal a aprobar, a la mayor brevedad posible, un plan especial de lucha contra el vandalismo, así como a hacer un mayor hincapié en las políticas de concienciación y de educación patrimonial”.
En enero de 2018, el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana acordaron la instalación de cámaras de videovigilancia en los siete edificios BIC adscritos a la Concejalía de Patrimonio y Recursos Culturales, a saber, la Lonja de la Seda, las Torres de Serranos, las Torres de Quart, las Reales Atarazanas, el Almudín, el Palacio de Cervelló y el Museo de la Ciudad. Desde entonces han pasado tres años y siguen sin funcionar.
“Desde el Grupo Municipal Popular, consideramos que la instalación de videocámaras en estos siete monumentos constituye una medida necesaria, pero insuficiente, al dejar fuera al resto de Bienes de Interés Cultural de titularidad municipal existentes en nuestra ciudad, así como a los edificios declarados Bien de Relevancia Local, todos ellos excluidos”.
“Entendiendo esta iniciativa como fundamental para la prevención de nuevos actos vandálicos y para la identificación, en caso de producirse, de sus presuntos infractores, creemos que el Gobierno municipal debería hacer un esfuerzo para extender, escalonadamente en el tiempo, este sistema de video vigilancia al resto de monumentos y edificios protegidos dependientes del Ayuntamiento de Valencia, a fin de evitar la repetición de episodios como los vividos en los últimos años, haciendo saltar todas las alarmas”,.añade Julia Climent en la moción.
Todos estos retrasos se producen al tiempo que aumentan las agresiones contra nuestro patrimonio o se siguen sin reparar los daños causados hace ya varios años en las Torres de Serranos o en las naves del Parque Central. En los últimos años, se ha incrementado alarmantemente el número de agresiones y pintadas realizadas en los principales monumentos de la ciudad, como la Catedral, la Lonja de la Seda, las Torres de Serranos, las Torres de Quart, los puentes históricos, los pretiles del río, el refugio antiaéreo de la Calle Serranos, las Atarazanas o las distintas alquerías existentes en nuestra ciudad.
Más de tres años después de anunciarse su instalación por parte del equipo de gobierno, las cámaras entraron finalmente en funcionamiento el pasado 9 de julio, si bien no todas ellas.
