VALENCIA | URBANISMO E INFRAESTRUCTURAS

Sigue la reurbanización del Cabanyal con nuevos trabajos en la calle dels Àngels

ELPERIODIC.COM - 24/10/2019 | Fotógrafo: Imagen de archivo

Los trabajos durarán tres meses y ampliarán aceras, ejecutarán nuevos alcorques y sustituirán el alumbrado de las fachadas por farolas

Las obras de reurbanización de la calle dels Àngels, que incluirán la ampliación de aceras y la colocación de arbolado para mejorar el espacio público y recuperar una de las zonas más degradadas del barrio del Cabanyal-Canyamelar, ya están en marcha. Los trabajos durarán tres meses y cuentan con un presupuesto de 403.976,02 euros.

La Concejalía de Desarrollo y Regeneración Urbana ha iniciado estas obras con el objetivo de primar el espacio para los peatones, con plataforma única. Para ello, se ampliarán las aceras de forma que, siempre en el sentido de la circulación, la del lado izquierdo tenga una anchura de dos metros, y la del derecho alrededor de 2,80, dejando tres metros para el ancho de la calzada.           

Actualmente, la calle dels Àngels está formada por unas aceras hechas con baldosas de diferentes materiales y que, en algunos tramos, son demasiado estrechas, lo que dificulta la circulación de los personas viandantes y, en especial, de aquellas funcionalmente diversas o que portan carritos de bebé. A ello hay que sumarle que la calzada tiene importantes grietas y que el espacio dedicado al aparcamiento no está bien delimitado.

Además, se ejecutarán nuevos alcorques para arbolado con su correspondiente red de riego y el alumbrado de las fachadas será sustituido por farolas. Por último, se canalizarán las líneas de los servicios de telecomunicaciones, alumbrado y suministro eléctrico tanto en la calle dels Àngels como en dos de sus transversales: Mossén Planelles y Carles Ros, lo que supondrá la eliminación de los postes de las aceras.

Esta obra se enmarca en el compromiso del gobierno municipal con la rehabilitación del barrio del Cabanyal-Canyamelar, y se suma a otras obras en marcha como la plaza del Rosari o Llorenç de la Flor, en la llamada «zona cero».

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