El Servicio de Alergología del Hospital Clínico ya ha vacunado a más de 300 personas alérgicas con extractos de veneno de avispa y abeja
Completado el tratamiento, mas del 90% de los pacientes vacunados contra la alergia a este veneno no vuelven a sufrir una reacción alérgica tras una picadura
Según estudios epidemiológicos entre un 0,8 y un 3,3% de la población sufre una reacción sistémica o generalizada tras la picadura de uno de estos insectos
El servicio de Alergología del Hospital Clínico de Valencia ha vacunado ya a más de 300 personas alérgicas a picaduras de himenópteros desde que se inició este tratamiento en el centro. De estos, el 60% han recibido tratamiento frente al veneno de abeja y el restante 40% frente al veneno de avispa.
Para la administración de estas vacunas desde el primer momento se ha utilizado una pauta de administración muy rápida, que permite alcanzar la dosis máxima de mantenimiento en dos días, con la consiguiente comodidad para el paciente (al evitar que acuda al hospital una vez a la semana durante 3 meses hasta alcanzar la dosis máxima) y la rapidez con la que se alcanza el efecto protector.
El Servicio de Alergia del Hospital Clínico, a través de su jefe de servicio, el doctor Peláez, fue pionero en este tipo de tratamiento cuando en 1987, recién creado el servicio, era el único centro del país que ofrecía este tipo de vacuna. "Dada la gravedad de las reacciones tras las picaduras y la posibilidad de desencadenar una nueva reacción al administrarla, existía en un principio miedo a estas vacunas e, incluso, a realizar las pruebas cutáneas con los venenos, necesarias para establecer los diagnósticos. Por ello muy pocos servicios de alergia de nuestro país se atrevieron a tratar a estos pacientes en su inicios".
Tal y como explica el doctor Peláez, jefe de Servicio de Alergología, "durante la primavera y el verano aparecen en nuestro entorno las abejas y las avispas. Habitualmente sus picaduras van más allá de las leves molestias que todos conocemos, sin embargo en las personas alérgicas a su veneno pueden provocar reacciones de suma gravedad, como la anafilaxia, llegando a ser una amenaza para la propia vida".
Los estudios epidemiológicos consideran que entre un 0,8 y un 3,3% de la población general sufre una reacción sistémica o generalizada tras la picadura de uno de estos himenópteros. "A pesar de lo abultado de esta cifra hay personas alérgicas a abejas o avispas que desconocen este tipo de tratamiento de inmunoterapia y que podrían beneficiarse de la vacunación. Por ello es necesario concienciar a la población sobre la gravedad que puede llegar a tener esta enfermedad y la necesidad de acudir a un especialista para su estudio y tratamiento" informa el doctor Peláez.
Según los datos obtenidos en una encuesta realizada por el servicio de Alergología del Hospital Clínico, en 1.064 trabajadores de un complejo industrial de la comunidad, el 84% refería haber sufrido una picadura de avispa o abeja a lo largo de su vida y la prevalencia de reacciones sistémicas o generalizadas fue del 2,3%. Según remarca el doctor Peláez "si extrapolamos los datos a la población general, en nuestra comunidad, alrededor de 100.000 personas habrían sufrido una reacción generalizada, de mayor o menor intensidad , y estarían en riesgo potencial de presentar una reacción alérgica, de igual o mayor gravedad, tras una nueva picadura".
"Recientemente se ha realizado una encuesta entre 912 médicos de Atención Primaria de varias comunidades, sobre la alergia al veneno de himenópteros y la anafilaxia en la que se desprende que anualmente son atendidos en sus consultas una media de 3,1 pacientes que ha sufrido una reacción sistémica tras una picadura de avispa o abeja, y el 56% de estos profesionales desconoce que la inmunoterapia (es decir, la vacunación con extractos de venenos de abeja o avispa) tiene tasas de eficacia superiores al 90%".
90% de los vacunados, no vuelven a sufrir una reacción alérgica
La manifestación más grave de la alergia al veneno de los himenópteros es la anafilaxia (reacción inmunitaria generalizada del organismo) que en su grado de mayor gravedad afecta seriamente a los sistemas circulatorio y respiratorio pudiendo causar la muerte. "Hay que remarcar que el único tratamiento que cura la alergia al veneno de himenópteros es la inmunoterapia específica, las vacunas. Este tratamiento generalmente dura 5 años, aunque en algunos casos se recomienda continuar la vacunación durante más tiempo" tal y como informa el doctor Peláez.
"Una vez completado el tratamiento, tras una nueva picadura, más del 90% de los pacientes vacunados contra la alergia al veneno de himenópteros no vuelven a sufrir una reacción alérgica, o al menos, no es una reacción que ponga en peligro la vida".
Importancia de administrar adrenalina en corto espacio de tiempo
Con respecto al tratamiento de la anafilaxia, que es la manifestación clínica de la alergia a las picaduras de avispas y abejas, existe un amplio consenso sobre la utilización de la adrenalina por vía intramuscular como primera elección de tratamiento al sufrir una picadura.
"El tiempo juega un papel fundamental a la hora de administrar la adrenalina tras el inicio de la reacción anafiláctica, independientemente de cual sea la causa, se hace necesario disponer de una manera fácil, rápida y segura para administrarla por vía intramuscular, como son los autoinyectores, disponibles en nuestro sistema sanitario desde hace ya unos años. Por ello los pacientes alérgicos a la picadura de himenópteros en riesgo de sufrir una anafilaxia deberían llevar siempre consigo un autoinyector de adrenalina y ser instruidos en la manera de utilizarlos" añade el jefe de servicio.