Fin de semana feminista en València

Contra la precarización feminizada de la vida y el racismo estructural que atraviesa la sociedad: estos han sido los ejes conductores de las acciones de la Assemblea Feminista de València en el fin de semana previo al 8 de marzo. Para el día de las mujeres, la Assemblea Feminista convocó huelga general feminista el pasado 22 de febrero, «para generar una jornada de lucha en que quede patente que todavía queda mucho de camino por hacer para acabar con el patriarcado y que tenemos la firme voluntad de hacerlo juntas» en palabras de Lorena García, portavoz de la Asamblea.

Las acciones arrancaban sábado 4 por la mañana con un desayuno popular y un taller de pancartas en la Zona Santiago, en el Cabanyal, con la participación de la Asociación Brúfol. A continuación, las convocantes se dirigían en pasacalle hasta la plaza del Cronista Francesc Montblanc para la lectura de un manifiesto del Grupo de Mujeres de la Malvarrosa, en que reclamaron más recursos para el barrio y esfuerzos por parte de la sociedad en su conjunto para poner fin a las violencias machistas. El pasacalle continuó después hasta el Mercado del Cabanyal, a las puertas del cual representantes de la Asociación Petra-Maternidades Feministas también compartieron con las presentes un escrito en que denunciaban las dificultades impuestas por el sistema laboral capitalista para maternar de forma libre, de acuerdo con la voluntad de las madres. Después, las feministas visitaron el Mercado del Cabanyal, donde repartieron información sobre la huelga feminista tanto a clientas como dependientas del recinto, para finalmente dirigirse hacia Cabanyal Horta. En este espacio vecinal cerraron la jornada con la lectura de un manifiesto donde reclamaron de nuevo «derechos y condiciones laborales dignas para todas».

Domingo 5, el barrio de Benimaclet se movilizaba contra «el racismo estructural que se encuentra en la base del capitalismo», según explica Silvana Cabrera, portavoz de la Assemblea Feminista. Además de actividades dirigidas las criaturas, el plato fuerte de la jornada era una «biblioteca humana», un espacio donde el público presente en la plaza podía sentarse con mujeres migrantes para escuchar en primera persona las situaciones de violencia provocadas por la ley de extranjería y el prejuicio y la xenofobia hacia las personas racializadas. La mañana cerraba con una actuación de música urban protagonizada por el grupo Fanny aka Gramea Soul y una comida popular elaborada por la Assemblea Feminista de Benimaclet con la colaboración vecinal.