Rita Barberá fotografía todo su despacho y deja 100 millones para pagos urgentes

Todo lo que hay en el despacho de la aún alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha sido fotografiado, cuadros, objetos y otros detalles para demostrar que “no me llevo absolutamente nada salvo el honor de haber pasado aquí la etapa más fructífera de mi vida''.

Así ha dejado constancia Barberá de su voluntad rubricada por los funcionarios en el momento de su despedida como primera munícipe y también en el momento de anunciar su renuncia a ser concejal con su gente en la próxima legislatura. O sea mañana no entregará la vara de mando a Joan Ribó, el portavoz de Compromís y segunda fuerza política de Valencia con casi 100.000 votos.

Barberá ha comparecido arropada por su equipo de gobierno en la sala donde habitualmente se reúne la Junta Local de Gobierno después de haber acudido a despedirse de los funcionarios del edificio de Tabacalera y de los Bomberos, con quienes posó en el Parque Central y hasta dirigió unas palabras por radio como también hizo con todos los policías locales sorprendiéndolos a todos ya que ese mensaje sólo lo hace en Nochebuena o Año Nuevo.

“Me marcho como siempre he querido, con dignidad”, comentó Rita Barberá y lo hace como no ha podido hacerlo el de Castellón. "¿Lo mejor? La transformación global de Valencia. El mayor premio que me llevo es haber sido alcalde 24 años. Han sido los años más felices, los más productivos y los que dan sentido a toda una vida", ha asegurado.

Lo hace después de 24 años al frente del salón Pompeyano y de una ciudad a la que deja con 100 millones para hacer frente a los pagos más inmediatos, según ha afirmado el interventor municipal, que ha acompañado a Barberá y ha hecho un relato prolífico del sistema económico y de que todo el dinero se encuentra en los bancos.

Ha citado Barberá diversos logros de sus 24 años como los 400 millones destinados al patrimonio histórico o el cheque escolar.

Al nuevo gobierno municipal, que será encabezado por el candidato de Compromís Joan Ribó, le ha deseado ''los mejores aciertos para la ciudad''. Y volvió a recordar que como partido más votado en las pasadas elecciones realizó para intentos de formar un gobierno ''moderado y de progreso con el PSPV y Ciudadanos, aunque no ha sido posible''.

Sobre su futuro inmediato afirma que son Las Cortes pero desde todos los círculos del PP la sitúan a final de mes o en julio en el Senado o de algún ministerio. Ella no quiere oír hablar de eso pero es el “retiro” más tranquilo y lejos de su ciudad a la que quiere y estima que no quiere ni oír hablar de Madrid. "Soy muy amiga de Rajoy, pero no sé lo que piensa", ha insistido e indicó. "Y pido perdón por lo que me haya podido equivocar".

Y casi al final de su comparecencia mostró su preocupación por las señas de identidad y las fiestas. "He cuidado y protegido todo lo que tiene que ver con nuestras fiestas. Había poca gente cuando llegué siguiendo las procesiones de la Virgen de los Desamparados o del Corpus y miren ahora cuánta hay... Somos el primer gobierno que ha ayudado a las Fallas", ha querido recordar.