La reducción de la huella de carbono y del gasto energético, claves de la política medioambiental del Colegio de Farmacéuticos de Valencia
La instalación de placas fotovoltaicas, la mejora de los aislamientos y de los sistemas de climatización centran los esfuerzos del MICOF para reducir los gases de efecto invernadero
Todo ello se ha llevado a cabo a través de una inversión muy calculada desde la Junta de Gobierno del Colegio que ha permitido una rebaja importante en la factura eléctrica
Con la celebración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático durante estos días en Glasgow (Escocia), el Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (MICOF) ha querido dar a conocer las distintas acciones que ha llevado a cabo en los últimos años para reducir la huella de carbono y la emisión de gases de efecto invernadero. “Los farmacéuticos, más allá de dispensar medicamentos también nos preocupamos por el bienestar y la calidad de vida de nuestros pacientes y ese esfuerzo lo centramos no solo en procurar informar sobre hábitos de vida saludable, sino que también pretendemos cuidar del medio ambiente para que nuestros pacientes vivan en un mundo sin agentes externos que puedan perjudicar su salud”, ha explicado el vicepresidente segundo del MICOF, Francisco Martínez.
Está demostrado que una mala calidad del aire tiene repercusiones en la salud de las personas, por lo que “se hace necesario implementar una serie de actuaciones que redunden en una mejora directa del medio ambiente”, ha señalado Martínez. Entre ellas ha recordado que el Colegio empezó a instalar el año pasado placas fotovoltaicas en las cubiertas de ambas sedes colegiales, empezando por Paterna y siguiendo por la de Valencia. Una iniciativa que, además de reducir la huella de carbono, ha supuesto también un ahorro de la factura eléctrica de las sedes colegiales.
La instalación de 180 paneles en agosto de 2020 en la cubierta de Paterna para producir hasta 60 kw ha supuesto hasta la fecha 37,97 toneladas de ahorro estándar de carbono, lo que supone haber evitado verter 45,09 toneladas de CO2 a la atmosfera, lo que equivale a plantar 1.002 árboles desde la fecha de instalación.
“A todo ello, hay que unir la sustitución de los techos y la instalación de cristales con aislamiento térmico en las ventanas de la sede de Paterna y la mejora de los cerramientos de las ventanas exteriores y del acceso principal de la sede de Valencia para evitar la dispersión del calor en invierno o del frío en verano dentro de las dependencias colegiales”, ha señalado el representante del MICOF. La idea, según Francisco Martínez, es conseguir ser “lo más autosuficientes y eficientes energéticamente hasta conseguir una mejora del 60% en cuanto a eficiencia térmica”.
Destacan también, entre otras acciones, el cambio de la iluminación LED de alta eficiencia energética de toda la iluminación interna y externa o el suministro de dos puntos dobles de cargadores para vehículos eléctricos en el garaje del edificio de Paterna. En esta misma sede, en cuanto a reducción de la factura eléctrica, ha habido un descenso del consumo eléctrico de un 33,26% en 2020 respecto a 2019 y se espera terminar 2021 con una rebaja del 45,74 % respecto a 2019 con todas las medidas llevadas a cabo.
En la sede de Valencia, la instalación en febrero de 2021 de 28 paneles fotovoltaicos en la cubierta para producir hasta 10 KW ha supuesto un ahorro de 3,9 toneladas de emisiones de CO2 a la atmósfera, lo que representaría el plantado de 175 árboles. En cuanto a consumo eléctrico, gracias a las placas fotovoltaicas instaladas, se ha reducido un 17% del importe eléctrico en 2021 respecto a 2020.
“El Colegio no solo tiene que ser patrimonio de los colegiados, sino de la ciudadanía en general. Por eso, nuestra actividad tiene que ser lo menos perjudicial posible para el medio ambiente y lo más eficiente posible en beneficio de nuestro planeta, nuestros pacientes, nuestros colegiados y nuestros trabajadores”, ha manifestado Martínez.