El PSPV presenta una propuesta para evitar estafas como la ocurrida a 400 jóvenes en una fiesta de Nochevieja en Valencia
El portavoz adjunto del PSPV en Les Corts, Rafael Rubio, ha anunciado que los socialistas valencianos han presentado una iniciativa en el Parlamento valenciano para que se tomen las medidas oportunas para que se eviten situaciones como la ocurrida la última Nochevieja en Valencia en la que cerca de 400 jóvenes no pudieron acceder a la fiesta de Fin de Año organizada en la Sala Alameda de Valencia. Unos hechos que, según ha indicado, se repiten año tras año pero “aquí no pasa nada y lo que no puede hacer el Consell, que es quien tiene la función de velar, mire para otro lado”, ha remarcado.
En este sentido, Rubio ha manifestado que “ya está bien de esta situación impunidad y de estafa” a estos jóvenes permitiéndoles la compra de la entrada y luego vetándoles el acceso a la fiesta por motivos de edad. Desde el PSPV platean que se devuelva el importe de las entradas a los jóvenes y que se estudie por parte de la conselleria pedir una indemnización para estos jóvenes a la empresa causante de esta situación.
Del mismo modo, el diputado ha solicitado la comparecencia del conseller de Gobernación, Serafín Castellano para que explique qué medidas piensa adoptar para evitar posibles estafas, para que no vuelva a ocurrir, y resolver los problemas planteados. En este sentido, ha criticado la pasividad del Consell que si hubiera actuado no se habría llegado a esta situación con las denuncias de los padres ante la Policía y los juzgados. En este caso, el diputado ha asegurado que no querría pensar que la conselleria correspondiente tiene alguna connivencia con el citado local “para que no se abra el correspondiente expedient”.
Rubio ha insistido en que cuando estos jóvenes adquirieron legalmente las correspondientes entradas quedaba muy claro el acceso de los menores de 16 años mientras que llegado el momento de acceder a los jóvenes de entre 14 y 16 años se les impidió la entrada. Por tanto, ha considerado que se ha producido una “estafa encubierta” ya que la compra-venta de entradas fue legal y en muchos casos debieron presentar el DNI.
