La Policía Nacional detiene a seis jóvenes como presuntos autores de dos robos con fuerza y un robo con violencia
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Valencia a seis jóvenes, una mujer y cinco hombres, de entre 17 y 41 años, de origen ecuatoriano y ruso, así como han imputado no detenido a otro joven, como presuntos autores de dos robos con fuerza en domicilios de Valencia a los que accedían tras haber sustraído las llaves de los mismos a personas de su entorno y un robo con violencia de un teléfono móvil. Los agentes realizaron un registro domiciliario en Mislata donde intervinieron parte de los objetos sustraídos entre los que cabe destacar más de 600 euros, diversas videoconsolas, un ordenador portátil y diversas joyas. Los objetos recuperados fueron entregados a sus propietarios.
Las investigaciones se iniciaron el día uno de abril cuando los policías tuvieron conocimiento que ese mismo día se había cometido un robo con fuerza en un domicilio del distrito de Abastos de Valencia mediante llave falsa.
Durante las investigaciones, los agentes averiguaron que un familiar de los propietarios del domicilio había sido quien había facilitado las llaves del mismo a los sospechosos, que se trataba de un grupo de jóvenes.
Continuando con las investigaciones, los policías averiguaron la identidad de los sospechosos, así como que los objetos sustraídos se encontraban en un domicilio de Mislata, motivo por el que establecieron un dispositivo de vigilancia en las inmediaciones del mismo, en el transcurso del cual detuvieron a dos de los jóvenes y realizaron una entrada y registro en éste, interviniendo más de 600 euros, varias videoconsolas, un ordenador portátil y diversas joyas.
Como consecuencia de las investigaciones, los agentes localizaron al resto de los miembros que fueron detenidos, así como averiguaron que los ahora detenidos eran además los presuntos autores de otro robo con fuerza en un domicilio de Trànsits y un robo con violencia.
Los detenidos, dos de ellos con antecedentes policiales, dos pasaron a disposición judicial, mientras que el resto tras ser oídos en declaración fueron puestos en libertad, no sin antes ser advertidos de la obligación de comparecer ante la Autoridad Judicial. El menor fue entregado a sus padres.