El Oceanogràfic suelta veinte tiburones criados tras ser recogidos por pescadores

Hoy hemos asistido a la muestra viva de cómo la colaboración ciudadana, la investigación y la conservación del medioambiente pueden derivarse en desenlaces extraordinarios. Por primera vez en España, el Oceanogràfic de València ha soltado veinte ejemplares jóvenes del tiburón pintarroja, criados en sus instalaciones a partir de huevos recuperados en descartes pesqueros de València y Xàbia.

"Gracias a la buena voluntad de los pescadores hemos conseguido obtener los huevos y los hemos estado monitorizando constantemente", ha explicado el biólogo de la Fundación Oceanogràfic y padre de proyecto, Pablo García. Un seguimiento de meses en los que se ha medido la calidad del agua, su temperatura así como la presencia de patógenos.

Tras la eclosión de los huevos, hoy se cierra un ciclo con la suelta de los tiburones: "A partir de ahora estos pequeñines irán mar adentro, al talud. No podemos medir su esperanza de vida ya que se trata de un proyecto piloto", ha aclarado García.

Eso sí, servirá para marcar la senda de trabajos futuros de este tipo. En este caso se ha trabajado con una especie que no estaba en peligro de extinción pero, visto el resultado positivo, el siguiente paso será trabajar con especies que se encuentren en peligro de extinción. Y este proyecto marca, también, un hito en la investigación y conservación de animales marinos.

Pablo García ha explicado que los animales han sido liberados en una zona similar a la empleada por las hembras para sus puestas, con el fin de que los tiburones crezcan en su medio natural. García ha señalado que "el fin último del proyecto es conseguir convertir un descarte de pesca en un recurso, en algo valioso que nos permita llevar a cabo una profunda labor educativa e investigadora, mientras se logra la conservación de estos increíbles animales".

La acción forma parte del proyecto de investigación y conservación de la Fundación Oceanogràfic. Para su puesta en marcha ha sido necesaria la colaboración del área de Conservación de la Fundación Oceanogràfic con la Associació LAMNA per a l´Estudi de Elasmobranquis de la Comunitat Valenciana, de la Dirección General de Pesca de la Generalitat Valenciana y la aportación de los pescadores del barco Cap Prim Segón de Xàbia y El Pausep de València, gracias a los cuales se ha dispuesto de huevos de dos especies de tiburones.

Los grandes perjudicados

Las poblaciones de tiburones y rayas sufren un gran declive a nivel mundial por la destrucción de su hábitat y la presión pesquera. En el Mediterráneo, de las 89 especies encontradas, el 52% tiene algún tipo de problema de conservación. Por desgracia no existen datos fiables sobre el total de individuos pescados ya que se suele confundir con otras especies, o muchas veces no son declarados.

El objetivo de este proyecto es poder trabajar con este tipo de especies para favorecer su conservación. Iniciativa que, desde la concejalía de Bienestar Animal, se apoya y pone en valor: "Es muy importante hacer campañas y fomentar el carácter pedagógico y concienciador de este tipo de proyectos", ha explicado Glòria Tello, concejala de Bienestar Animal, en la presentación del trabajo.

También apoya el proyecto la Marina de València, que lleva tres años colaborando con el Oceanogràfic para que pueda recoger en sus aguas distintas especies que después habitan en los acuarios del centro marino.