Miles de personas se manifiestan en Valencia el 9 de Octubre con el lema “Somos País, Hablamos Valenciano”

Miles de personas han salido a las calles de València y otras ciudades para sumarse al llamamiento de la Comisión 9 de Octubre, la cual coordina Acción Cultural del País Valenciano (ACPV), una plataforma que aglutina entidades, sindicatos y partidos. La manifestación, que ha transcurrido con total normalidad, ha tenido como punto de partida la plaza de San Agustín y ha reivindicado la defensa de la lengua, el territorio y los medios de comunicación públicos bajo el lema «Somos País, hablamos valenciano».

Desde ACPV, consideran esencial la movilización de este año para denunciar la "agresión sistemática que sufre nuestra lengua y territorio". El empeoramiento de la situación lingüística se ha evidenciado con la "imposición de la Ley Rovira por parte del gobierno del Partido Popular, una normativa que agravia la diglosia institucional y margina el valenciano en el ámbito educativo, social y administrativo", denuncian.

En la misma línea, la manifestación ha puesto de relieve la necesidad de preservar nuestro territorio ante las "amenazas especulativas y políticas depredadoras que ponen en riesgo el futuro sostenible" de la Comunitat Valenciana. Esta movilización, por lo tanto, no solo ha defendido la lengua y el territorio, sino también los "derechos como ciudadanos con derecho a una libertad de expresión sin censura".

Otro foco de atención ha sido la libertad de prensa, particularmente en respuesta a las reformas legales que afectan À Punt. La modificación de la ley que elimina el consenso para la dirección del ente público de comunicación "supone una amenaza clara para la pluralidad informativa y el derecho a una información libre y democrática", han asegurado.

ACPV denuncia una agresión al final de la manifestación

ACPV lamenta que al final de la manifestación no se haya garantizado la seguridad, y según hemos podido saber, una persona ha sufrido una agresión en la calle Castelló de València. La agresión ha sido acompañada por el grito “Guarro de mierda”. Denuncian que estas situaciones "nos llevan a los peores momentos del pasado". 

La importancia de la normalidad era especialmente importando este año, aseguran, puesto que se ha dado "la primera sentencia firme que condena los fascistas y acaba con la impunidad de los grupos de ultraderecha que en el pasado sembraron violencia en esta Fiesta. Nos alegramos que las imágenes de 2017 y otros episodios vergonzosos hayan tenido consecuencias por los agresores".

Por último, concluyen afirmando que "confiamos que este sea el camino para garantizar que la reivindicación cívica y pacífica continúo siendo el eje central de nuestra lucha".