La lucha contra el maltrato a nuestros mayores

Existe una realidad silenciada que, en días como hoy, sale a relucir: el abandono de las personas mayores. Cada 15 de junio se celebra el Día Mundial de la Toma de Conciencia del maltrato a las personas mayores, una jornada para recordar que, pese al ritmo de vida que impone la sociedad actual, los mayores siguen siendo parte importante de ella y cada vez más.

Porque la población española sigue envejeciendo. De hecho, según datos del padrón continuo del INE en España, en enero de 2014 había 8.442.427 personas mayores, (65 y más años) que representan el 18,1% sobre el total de la población (46.771.341), aumentando en mayor medida la proporción de octogenarios. Una tendencia que sigue en la Comunidad Valenciana. Además, las mujeres son las más predominantes en la vejez, un 34% más que los hombres.

Ante estas cifras, hoy se quiere dar protagonismo a esta parte esencial de la sociedad que muchas veces vive olvidada tal y como explica Agustina Guillén, enfermera y presidenta del Centro Municipal de Actividades Para Personas Mayores Viveros en Valencia: “Antes teníamos a nuestros ‘yayos' en casa pero ahora el trabajo no nos permite atenderlos y recurrimos a los cuidadores o las residencias”.

Pero más allá de esta realidad que viven muchas familias españolas, lo que se ha querido denunciar en la jornada de hoy es el maltrato que viven muchas personas mayores: “No es preciso que sea físico, sino psicológico o económico”. En este sentido, Gloria Aparisi, presidenta del Centro Municipal Actividades para Personas Mayores “El Calvari”, remarca la importancia de este día: “Es especial para nuestros mayores, para quienes convivimos con ellos y para el resto que, algún día, será también mayor”.

Para dar visibilidad a ese 18% de nuestra población, el Ayuntamiento de Valencia ha abierto este miércoles las puertas a todos los mayores. En el Salón de Cristal del consistorio se ha celebrado un encuentro entre diferentes asociaciones. “Escuchar, mimar y dar cariño”, estas son las claves para atender a nuestros mayores y que se olvidan con frecuencia: “Se merecen el mejor trato del mundo”, concluye Aparisi.