El Levante UD pone a prueba la teoría del vaso en Eibar

La teoría del vaso medio lleno o medio vacío, según quien lo mire, es más que aplicable al partido que ha hecho el Levante UD en Ipurúa frente al Eibar. El granota optimista dirá que se ha sumado un punto, se han marcado 3 goles y podía haberse perdido si el árbitro hubiera concedido un gol legal a los vascos anulado por fuera de juego. El granota pesimista verá cómo se ha dilapidado un 0-2 al descanso, se han vuelto a encajar 3 goles y el equipo se ha venido abajo en la segunda parte y ha dejado escapar dos puntos en el último minuto del descuento.

Lo cierto es que los valencianos salieron muy enchufados desde el inicio del partido, y apenas cumplido el minuto y medio de juego se adelantaban en el marcador gracias a un chut de Morales muy ajustado al palo izquierdo de la portería vasca. Morales no celebró el gol como señal de respeto al que fue su equipo la pasada temporada. No podía empezar mejor la cosa para el equipo que hoy vestía con su equipación verde por coincidencia de colores azulgranas con el Eibar.

Entonces despertó el Eibar en ataque, que entre los minutos 20 y 25 tuvo dos grandes ocasiones a las que respondió con dos grandes paradas Mariño, que hoy ocupaba la titularidad de la portería del Levante. En la primera de ellas, Mariño protagonizó una de las mejores paradas de la jornada al meter una mano increíble cuando retrocedía hacia su portería por una vaselina certera de Berjón al verlo adelantado. La segunda de ellas deteniendo a bocajarro un remate de cabeza de Albentosa en jugada a balón parado.

Y justo al acabar la primera parte llegaba una jugada trenzada entre Casadesús y Rubén, cuyo lanzamiento a puerta acababa con el balón rechazado a los pies de Camarasa para que éste estableciese el 0-2 en el marcador. Irse al descanso con este resultado y controlando en gran manera el juego no hacía presagiar lo que iba a verse en los segundos 45 minutos de juego.

Un churro y dos golazos

Mendilibar no hizo ningún cambio y el equipo salió con su mismo once a disputar la segunda parte, pero en el primer minuto de juego un centro de Javi Lara rebotaba en el cuerpo de Pedro López y se colaba en la portería granota ante la desesperación de Mariño que quedó completamente descolocado por el rebote del balón. Un churro de gol que metía al Eibar de nuevo en el partido con toda la segunda parte por disputarse, y vaya si iba a ser decisivo este gol.

Porque el Levante, lejos de controlar el partido y buscar contras rápidas, o simplemente de seguir presionando como lo había hecho en la primera parte, empezó a recular cada vez más hacia su propia portería. Ya no era que el Eibar empezase a acercarse cada vez más al portal valenciano, es que el Levante apenas daba muestras de poder inquietar el área rival, y así las cosas el cerco a Mariño cada vez se hacía más estrecho.

Y en una falta cercana al córner derecho del cancerbero levantinista se gestó uno de los golazos de la jornada. Porque sacar una falta poniendo el balón a tu compañero para que éste lo empalme de manera terrorífica contra la red se ve pocas veces, pero ayer fue una de ellas. Saúl marcaba así el empate a dos y empezaba a poner los nervios a flor de piel a la parroquia granota que en poco más de 20 minutos había visto evaporarse toda la ventaja en el marcador.

Y en estas llegó otro gol del Eibar, por mediación de Piovaccari que el árbitro anulaba por fuera de juego a instancias de su asistente. En la repetición podía apreciarse claramente que el gol era legal aunque no subiese al marcador. El Levante estaba pasando por sus peores minutos y el primer cambio de Mendilibar, un fallón Pedro López por El Adoua, no había dado ni la más mínima señal de mejora en el equipo.

Xumetra por Barral y Sissoko por Morales, despedido con ovación por la afición del Eibar, cerraron los cambios valencianos a la espera de que surgieran efecto en un mayor control del balón. Sufriendo por el resultado y casi casi esperando el final del partido como mal menor, llegó la jugada levantinista que hacía que Casadesús marcase un golazo por toda la escuadra. Era el minuto 78, el Eibar había hecho un gran esfuerzo y este 2-3 parecía ser un mazazo definitivo para los vascos.

Pero la justicia poética para unos, o la infame desdicha para otros, hicieron que en el tercero de los cuatro minutos de descuento dados por el árbitro se estableciesen las definitivas tablas en el marcador. Una jugada que en principio no debía de haber tenido mayores problemas para el Levante acabó con la defensa retrocediendo y con Piovaccari revolviéndose de la defensa granota y poniendo el definitivo empate a tres.

La felicidad de los vascos y las maldiciones en arameo de los granotas mientras se dirigían a despedirse del centenar de aficionados levantinistas presentes en Ipurúa, ponían el punto y final al partido. ¿Se ha perdido una ocasión inmejorable para traerse los 3 puntos a Valencia, o se ha salvado un punto? Ustedes dirán cómo ven el vaso mientras se espera al Real Madrid en el Ciutat de València la próxima jornada.

Ficha Técnica

Eibar: Xabi Iruretagoiena, Bóveda, Albentosa, Raúl Navas, Abraham, Dani García, Errasti, Saúl, Arruabarrena, Javi Lara, y Ángel.

Levante UD: Mariño, Vyntra, Iván López, Pedro López, Héctor Rodas, Pape Diop, Camarasa, Rubén, Morales, Casadesús y Barral.

Cambios: Abraham (46', Lillo), Ángel (46', Piovaccari), Pedro López (71', El Adoua), Arruabarrena (79', Lekic), Barral (81', Xumetra), Morales (85', Sissoko)

Arbitro: Alberto Undiano Mallenco
Amonestaciones: Bóveda, Lillo y Arruabarrena (Amarilla) y Casadesús (Amarilla)