El Jesús Nazareno del Santo Encuentro preside el cortejo de los Tres Encuentros

Dicen que en la Semana Santa Marinera todo esta inventado pero es incierto. Cuando una hermandad quiere llenar de solemnidad y recogimiento sus celebraciones toma decisiones para dar mayor prestancia a su colectivo y a su imagen.

Eso es lo que ha hecho la Hermandad del Santo Encuentro del Canyamelar al decidir sacar por vez primera a hombros a su imagen titular, el Jesús Nazareno salido de la gubia de Bernardo Morales en 1848, en un cortejo procesional cuya duración será de una hora y cuarto.

Lo hará en la noche del Viernes de Dolor cuando Nuestra Señora de la Soledad, con ese manto restaurado, se recoja en su templo escoltada por sus granaderos. Será a las 23 horas cuando por debajo del dintel de la puerta de Nuestra Señora del Rosario salga el jesús con el madero a cuestas llevado en volandas para celebrar la Procesión de los Tres Encuentros.

El primero de esos actos tendrá lugar en la plaza del Rosario cuando se encuentre con su Madre, la Virgen María; el segundo a la altura del número 27 de la calle José Benlliure, cuando tomará protagonismo la Verónica, y el tercero ya en el cruce de las calles Arcipreste Vicente Gallart con la calle Progreso, donde tendrá lugar el tercero con las Mujeres de Jerusalén.

Ya desde ahí a hombros de sus portadores se dirigirá a donde estará todos los días de la Pasión, al número 108 de la calle Progreso, el casal de la falla Progreso-Travesia de la Marina, donde tendrá lugar el encuentro con María Santísima de las Angustias y se podrá venerar las dos imágenes.

Los cofrades del Santo Encuentro, Amparo Carabal, Tatín Vivo, Maribel Gargallo, Agueda Gimeno, las hermanas Villanueva, Aroa y Andrea, entre otros estarán acompañados con la música seca del tambor cuyo sonido rasgará la noche del Canyamelar.