Investigan nuevos tratamientos respetuosos con el medio ambiente contra las enfermedades fúngicas de la madera de la vid
El estudio pretende, mediante una tecnología innovadora de electrólisis de membrana, mejorar la calidad fitosanitaria del material vegetal en vivero y, en viñedo, un tratamiento para proteger las heridas tras la poda
Las enfermedades fúngicas de la madera de la vid se han convertido en un grave problema de este cultivo que causa importantes pérdidas de producción. Los distintos hongos que provocan estas enfermedades generan síntomas parecidos en las vides, como la alteración interna de la madera por necrosis y/o podredumbre seca, la reducción del desarrollo y el vigor, brotaciones raquíticas, la ausencia o el retraso en la brotación y un decaimiento general que puede acabar con la muerte de la planta.
Las medidas habituales para la lucha contra estas enfermedades se centran en la prevención, como utilizar material vegetal de alta calidad fitosanitaria para el establecimiento de nuevos viñedos o la desinfestación previa del terreno. También no realizar una plantación durante varios años en suelos de vid y eliminar así cualquier resto vegetal del cultivo anterior, así como aplicar fungicidas o agentes de biocontrol autorizados para proteger las heridas de poda. No obstante, la disponibilidad de productos autorizados para el control de los hongos de la madera es muy limitada.
En el proyecto Aqua-Vid se utiliza la tecnología Aquactiva, efectiva para luchar contra la infección causada por hongos. Utiliza componentes sencillos como agua, sal y electricidad, a través de un proceso de electrólisis de membrana que permite una producción in-situ del biocida a muy bajo coste. Con estos elementos se genera un agente oxidante potente capaz de atacar y eliminar los patógenos, y que supone una alternativa a otras tecnologías de desinfección.
La tecnología Aquactiva es un proceso natural que imita el sistema inmunitario humano y reproduce un agente oxidante similar al producido por los glóbulos blancos, lo que le da la propiedad de ser totalmente inocuo para el ser humano y el medio ambiente.
Este proyecto multidisciplinar ha sido financiado por la Agencia Valenciana de Fomento y Garantía Agraria de la Generalitat Valenciana y por la Unión Europea a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) AGCOOP_A/2019/012.