Investigadores de la UV en un estudio que insta a llevar la medicina de precisión al tratamiento del traumatismo craneoencefálico
Investigadores internacionales han propuesto por primera vez en la Unión Europea centrar el foco en las consecuencias sociosanitarias del traumatismo craneoencefálico. "En la publicación destacamos que se reducirÃa sustancialmente la tasa global del traumatismo craneoencefálico (TCE) aplicando mejores polÃticas de prevención, directrices nuevas para la atención clÃnica y enfoques nuevos de investigación", ha indicado Javier Belda, profesor titular de CirugÃa de la Universitat de València y coordinador de este estudio por parte del Instituto de Investigación Sanitaria (INCLIVA) de la Conselleria de Sanitat.
En España son cuatro los centros que han colaborado en la redacción del artÃculo, entre los cuales destaca el INCLIVA, con Rafael Badenes como investigador principal, y los investigadores de la Universitat de València Javier Belda y Armando Maruenda, como coinvestigadores.
Cada año se registran más de 50 millones de nuevos casos de TCE en el mundo. De estos, se diagnostican dos y medio en la Unión Europea. En la actualidad, esta enfermedad es una de las causas principales de muerte y discapacidad entre los jóvenes adultos (de 18 a 32 años). Entre otras consecuencias, puede causar pérdida de la memoria y ser un potenciador del riesgo de sufrir, a largo plazo, enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer, según el estudio que presentó el CENTER-TBI en la Comisión Europea el pasado 7 de noviembre.
A través de 12 puntos clave, en el artÃculo publicado a raÃz del estudio, «Traumatic brain injury: integrated approaches to improve prevention, clinical care, and research», el grupo internacional insta a la implantación de métodos más precisos, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento. Según el CENTER-TBI, la introducción de nuevas técnicas es la base para definir subgrupos dentro de la propia enfermedad, aplicar tratamientos más eficaces y conseguir, finalmente, mejores resultados.
"El traumatismo craneoencefálico afecta un gran número de personas en todo el mundo con consecuencias potencialmente graves para su salud y bienestar, también implica una gran carga económica para unos servicios médicos ya sobrecargados", asegura David Menon, coordinador del proyecto CENTER-TBI. El profesor de la Universidad de Cambrige sostiene que no se está haciendo lo suficiente para prevenir y tratar este tipo de lesiones y que los tratamientos son demasiado generales y, por lo tanto, poco efectivos. Andrew Mass, profesor de la Universidad Hospital Autwerp, ha coordinado junto con Menon la redacción del artÃculo publicado en The Lancet Neurology. La investigación se desarrolló entre diciembre de 2014 y octubre de 2017.
El traumatismo craneoencefálico no solamente comporta anualmente unos notables costes personales, también implica unos gastos económicos cuantiosos. El tratamiento de la enfermedad y sus resultados llega cada año a los cuatrocientos mil millones de dólares. Atendiendo al Producto Interior Bruto mundial, uno de cada 200 dólares o un 0,5% del PIB mundial se destina a cubrir gastos generados por el TCE, según el artÃculo.
Proyecto europeo CENTER-TBI
CENTER-TBI es un proyecto europeo que forma parte de la iniciativa global INTER-TBI, dirigida a la investigación del traumatismo craneoencefálico. Fundado en el año 2011 con el objetivo de mejorar las condiciones de los pacientes con traumatismo craneoencefálico, cuenta en su investigación con la participación de más de 300 especialistas clÃnicos de varias instituciones y paÃses.
"Estamos orgullosos de formar parte de la red internacional de investigación del traumatismo craneoencefálico, una unión que ha generado un consenso. La publicación en el Lancet Neurology ha permitido que el pasado mes de noviembre se presentara la problemática del manejo de estos pacientes en la Comisión Europea, lo cual facilitará que se incluya dentro de las lÃneas prioritarias de investigación biomédica", afirma el profesor Belda.
Accidentes de tráfico y caÃdas
El aumento de la industrialización y el uso de vehÃculos de motor están causando un gran número de traumatismos craneoencefálicos, debido a los accidentes de tráfico en paÃses con ingresos medios y bajos, que afectan más a las personas jóvenes. En los paÃses con altos ingresos, la incidencia del TCE es más alta y aumenta en los ancianos, debido a las caÃdas. El peor pronóstico en el anciano implica que los tratamientos no se instauren o se retiren prematuramente, con resultados peores que refuerzan el escepticismo terapéutico en el tratamiento de estos pacientes longevos.