El General de València cierra con éxito el primer año de funcionamiento de su modelo de Urgencias Pediátricas
Hace un año que el Hospital General de València puso en marcha sus nuevas urgencias pediátricas, que se trasladaron al pabellón Materno Infantil, con lo que concentró toda la atención pediátrica en un mismo edificio, con un nuevo modelo que integraba un circuito independiente al del adulto.
Este cambio de modelo ha supuesto, además de una nueva ubicación, independiente del resto de las urgencias, un cambio en la filosofía en el trabajo del equipo, con un aumento del personal con experiencia en la patología pediátrica y con dedicación plena.
Además, dentro del espacio que se ha ampliado con el traslado de las urgencias, se ha planificado un triaje específico para el niño y se ha puesto en marcha una observación de urgencias y una área de radiología pediátrica en el mismo edificio.
Según la jefa del servicio de Pediatría, Empar Lurbe, “el objetivo era prestar una atención diferenciada, en un espacio diseñado y adaptado para los niños, donde se concentrase toda la asistencia de forma independiente a la del adulto. Integramos todos los recursos, incluso el registro, para que el circuito desde que el niño entra en urgencias hasta que sale sea exclusivo para ellos”.
La optimización de todos estos recursos ha redundado en una asistencia más eficiente. Así pues, desde que en marzo de 2017 las urgencias comenzaran a funcionar con estas características, se han atendido a casi 20.000 pacientes.
Para ello, ha sido clave la nueva área de observación de urgencias, donde se atienden a los niños que precisan valorar su evolución.
Actualmente, el departamento Valencia-Hospital General atiende a una población de 355.768 habitantes, de los que 52.282 están en edad pediátrica. La puesta en marcha de este modelo ha sido un paso esencial para aumentar la calidad y el bienestar de los pacientes y de sus familiares, que es el objetivo final de todos los profesionales de este servicio de Pediatría.