El equipo Cirugía Radioguiada del Clínico de Valencia se forma para mejorar la precisión en la cirugía oncológica
Se trata de una nueva tecnología que permite comprobar durante la intervención quirúrgica si se ha eliminado todo el tumor
Un equipo de profesionales se ha desplazado al Hospital Maria Middelares, en Gante, para formarse en la técnica
El equipo de Cirugía Radioguiada del Hospital Clínico Universitario de Valencia ha participado recientemente en una formación avanzada para utilizar una tecnología innovadora que permite realizar un control preciso de los márgenes quirúrgicos (límites de los tumores que hay que extirpar) directamente en el quirófano en las cirugías oncológica. Se trata del sistema AURA10, desarrollado por XEOS.
Las sesiones se han llevado a cabo en el Hospital Maria Middelares, en Gante (Bégica) y ha asistido el equipo formado por el doctor Orozco y el doctor Sabater del Servicio de Medicina Nuclear, junto con las doctoras Buch y Muñoz de las unidades de Cirugía Mamaria y Hepatobiliopancreática.
Esta nueva tecnología consiste en un equipo portátil de PET-TC que ayuda a los especialistas en cirugía a comprobar si han logrado eliminar todo el tejido tumoral durante la operación, lo que puede reducir la necesidad de cirugías adicionales.
“La reducción de márgenes quirúrgicos afectados en la cirugía oncológica es uno de los mayores desafíos. Este avance tecnológico significa que los pacientes pueden recibir un tratamiento más preciso, con menores riesgos y mejores resultados a largo plazo” ha explicado el doctor John Orozco, especialista de Medicina Nuclear del Hospital Clínico de Valencia.
“Uno de los principales problemas a la hora de intervenir una lesión tumoral es que parte del tumor no sea extirpada del todo durante la intervención debido a su difícil localización o acceso y, con esta tecnología, podemos ver si se ha resecado todo correctamente en el mismo quirófano durante la intervención” ha detallado el doctor Jorge Sabater, especialista de Medicina Nuclear del centro hospitalario.
“Al paciente se le inyecta un radiofármaco, se opera de manera habitual y se pasa la pieza tumoral por el equipo. Se le hace un PET-TC a la pieza y gracias a la imagen morfológica y funcional podemos ver los márgenes dentro del mismo quirófano decidiendo si se tiene que ampliar o no alguno de los márgenes de la extirpación” ha añadido el doctor Sabater.
Además, durante la formación, el doctor Orozco, quien también es investigador en el Instituto de Investigación del Hospital Clínico, INCLIVA, compartió las experiencias del Hospital Clínico Universitario de Valencia en áreas como la cirugía 3D, la planificación quirúrgica guiada por PET-TC, la cirugía radioguiada robótica y la cirugía molecular.