La comunidad filipina festeja a su patrón con una misa en la iglesia de San Mauro
La colecta se destina a los damnificados por el tifón Haiyán
El arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, ha presidido hoy, una eucaristía en la parroquia de San Mauro Mártir, de Valencia, con motivo de la fiesta del Santo Niño de Cebú, patrón de las Islas Filipinas, cuya colecta se destinará a los damnificados por el tifón Haiyan.
La celebración de esta festividad “es una tradición desde hace años en nuestra parroquia, ubicada en la calle Noguera 11, en la que se reúne gran parte de la comunidad filipina que reside en Valencia el primer domingo de cada mes”, según ha indicado hoy a la agencia AVAN José Mera, párroco de San Mauro.
En esta ocasión, y con motivo de la festividad del Santo Niño de Cebú que se celebra el domingo siguiente al día de Reyes, “están invitados a participar en la eucaristía todos los feligreses, las comisiones falleras del barrio así como distintas casas regionales, además de los ciudadanos filipinos”, ha añadido. Cabe destacar que entre los asistentes firguraba el presidente de la Casa de Murcia y Albacete, Blas García, que ayer fue elegido como presidente de la Federación de Casas y Centros Regionales de España en Valencia.
Igualmente, en la eucaristía se realizará una colecta especial que irá destinada a los damnificados por el tifón que asoló Filipinas hace dos meses. Además, está previsto que en la celebración participe el sacerdote filipino Edgar de la Cruz Balboa, vicario de la parroquia Asunción de Nuestra Señora, de Utiel.
Asimismo, durante la celebración “los participantes cantarán en el idioma tagalo, propio de las Filipinas, y leerán dos lecturas en esta lengua”, según el párroco, que ha explicado que “al finalizar la eucaristía también realizarán unos bailes típicos ataviados con indumentaria de su país y después compartiremos todos un aperitivo en los salones parroquiales”.
El Santo Niño de Cebú
La figura de madera del Santo Niño de Cebú se encuentra en la Basílica del Santo Niño, en la ciudad de Cebú, la segunda más importante en Filipinas después de la capital, Manila. Según la tradición, el Santo Niño de Cebú fue un regalo que el conquistador español Fernando de Magallanes hizo a los reyes de la tribu de Cebú en 1521 cuando se convirtieron al cristianismo.
En 1565, un marinero encontró la figura en una caja entre unos escombros y se la entregó a los religiosos agustinos encargados de cristianizar las Filipinas y a Miguel López de Legazpi, primer gobernador de la Capitanía General de las Filipinas y fundador de las ciudades de Cebú y Manila, quien después impulsó la creación de la Confraternidad del Santo Niño de Cebú.
