La UV alerta sobre el peligro del ejercicio en casa para personas con dolencias físicas
La Facultat de Fisioteràpia publica online un programa de ejercicios terapéuticos
Desde la Facultad de Fisioterapia de la Universitat avisan de que los programas de ejercicio físico que inundan las redes con motivo del confinamiento por la crisis de la COVID-19 pueden agravar la sintomatología de las personas con dolencias físicas y producir una catastrofización y cronificación del dolor.
La pandemia mundial por el coronavirus ha provocado el confinamiento de la población española con el fin de frenar la expansión del coronavirus. Esto ha promovido que gran parte de la población haya optado por realizar actividad física desde su casa. No obstante, como alertan desde la Facultad de Fisioterapia de la Universitat de València, las personas con dolor o en proceso de recuperación de una dolencia física o de una lesión han de tener cuidado con los ejercicios a realizar.
La profesora Pilar Serra explica que este tipo de personas no debería realizar ejercicio físico que no fuera adaptado a su condición clínica, ya que, de otro modo, podría agravarse su sintomatología. “Pero sí que es muy importante que cuenten con programas terapéuticos domiciliarios para tratar de recuperar movilidad y reducir el dolor”, expresa Serra.
“Cuando se experimenta dolor de larga duración, y por la previsión que tenemos parece que la situación no se vaya a resolver rápidamente, este no solo se siente físicamente sino que de él se derivan consecuencias psicológicas como la catastrofización del dolor, una construcción psicosocial específica del dolor, que lleva al pesimismo sobre su propio dolor y su evolución y a su vez, esto se considera un factor de riesgo para su cronificación”, asevera la profesora de la Facultad de Fisioterapia.
Pilar Serra afirma que “esto repercute en la condición física, ya que se ha constatado que, a mayor nivel de catastrofismo, menor resistencia muscular y por tanto, más fatiga”. Paralelamente a la afectación neuromuscular, también repercute negativamente en el sistema cardiovascular, inmunológico y neuroendocrino. Todo esto, señala la profesora, provoca una alteración de la capacidad funcional o lo que es lo mismo, una reducción de la capacidad para realizar actividades básicas de la vida diaria.
Para tratar de contrarrestar estos problemas, la Facultad de Fisioterapia ha desarrollado diversos programas de ejercicio terapéutico y, lo seguirá haciendo mientras dure el confinamiento. Son documentos escritos y audiovisuales para proporcionar algunos ejercicios domiciliarios específicos para determinadas patologías o lesiones. “Siempre a realizar con mucha cautela, ya que la situación ideal que es realizarlos con la supervisión del fisioterapeuta, en este caso, no es posible”, recuerda Pilar Serra.
Pilar Serra apunta que es necesario que las personas se mantengan activas, pero en caso de lesión o dolencia, los planes deben adaptarse al cuadro clínico de cada paciente para evitar efectos secundarios no deseados.