Los agricultores valencianos anuncian macroprotestas: “Estamos muy desesperados”

“Estamos viviendo momentos dramáticos, estamos verdaderamente desesperados”. El campo valenciano lanza un grito de auxilio y pide sensibilidad política para solventar los problemas que están transformando al sector agrario en un sector “ruinoso”. Es por ello que los agricultores valencianos van a convocar grandes manifestaciones para lamentar la situación que viven.

Bajo el lema ‘SOS: per la supervivència del camp valencià’ y convocados por todas las organizaciones profesionales agrarias de la Comunitat Valenciana (AVA-ASAJA, La UNIÓ de Llauradors i Ramaders, CCPP-COAG y UPA-PV), miles de agricultores con sus tractores están llamados a manifestarse en Valencia y en Madrid para lanzar ese grito de socorro. La primera manifestación tendrá lugar el 25 de febrero en Valencia, de la plaza de San Agustín a la Delegación del Gobierno; el 10 de marzo será frente a la oficina de la UE en Madrid y el 20 de marzo está llamado todo el medio rural de España en Madrid.

¿Cuáles son los motivos que les llevan a estas macroconvocatorias? El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, explica que son muchos: la naranja tiene un precio ruinoso, los caquis han acabado la cosecha muy mal, el vino no tiene el precio que corresponde, existe una gran amenaza de perder de ayudas de la PAC, que podrían poner a los arroceros valencianos contra las cuerdas.

“Se dan demasiadas circunstancias como para no estar verdaderamente desesperados. Porque no tenemos seguridad de un precio justo, ni seguros que nos cubran las inclemencias meteorológicas, porque tenemos las plagas continuamente destruyendo las cosechas y la administración nos deja sin armas para luchar”.

En este sentido, Aguado lamenta que en Europa todo son exigencias y acuerdos que favorecen a países terceros, “mientras que a nosotros nos están martirizando”. Además es muy difícil encontrar mano de obra calificada, la fauna silvestre está causando muchos daños, les roban las cosechas y les deshacen las infraestructuras: “No hay Dios que nos ampare, hasta el agua están poniendo en peligro para Valencia”.

Todas estas cuestiones, “y muchísimas mas”, son las que hacen que los labradores valencianos convoquen estos actos de protestas: “El campo lanza un grito de auxilio para que los políticos empiecen a ser sensibles y a escuchar, que es su responsabilidad”, concluye Cristóbal Aguado.