Artistas de la música unen sus voces para cantar por los animales en pleno confinamiento
Bandas como Azrael, SynlakrosS, Abismo o Electric Bang han participado en este proyecto
En el 35 aniversario de la liberación del macaco Britches, por un grupo de activistas que entraron a la fuerza en un laboratorio de vivisección de California, conocidos artistas de la música se han unido para cantar, en plena cuarentena mundial, el tema "Llora Britches", con letra del poeta de los animales Ángel Padilla y música de los madrileños Lyvon y Eugenio Toribio.
Britches era un mono macaco que con apenas dos días de vida fue arrancado de su madre, destetado y condenado, por un científico que lo tomó como objeto de investigación, a un experimento cuya justificación era observar los efectos de la ceguera inducida: el vivisector le cosió los párpados, quería comprobar si la ceguera permanente produciría daños cerebrales y si un dispositivo electrónico de ultrasonidos colocado en su cabeza, a modo de casco, afectaría sus oídos hasta el punto de dejarlo sordo. Britches pasaba su martirio en una diminuta jaula, alejado del calor de su madre se abrazaba a un frío cilindro metálico, sin atención alguna. El proyecto lo condenaba a tres años como objeto de experimentos y luego lo matarían. Una vez muerto estudiarían su cerebro. Iratxe Arruti, letrada y presidenta de la entidad de defensa animal ASPAC, explica que "Britches afortunadamente fue liberado de su encierro y sufrimiento, pero billones de animales en este mismo instante sufren iguales o peores calvarios en laboratorios, estabulaciones ganaderas, zoos, circos, piscifactorías, confinados de por vida y desde su nacimiento." Arruti advierte de la hilación de lo que le ocurre al mundo humano hoy día y nuestro (mal) comportamiento con los animales. El mismo razonamiento que hace poco lanzó al mundo Jane Goodall: "nosotros un día saldremos del confinamiento, podremos abrazar a nuestros seres queridos, sentir y mostrar afecto; los animales no humanos, en los infiernos a los que los somete el humano, jamás podrán sentir nada parecido. Sólo la nada y el horror. Esto debe terminar."
La canción "Llora Britches" (Lyvon), publicada inicialmente en 2007, ha sido producida en los Estudios ERL de Enrique Rosales (Azrael) y coproducida por Lyvon, con instrumentos de los músicos David Lamb, Ivan Muñoz (SynlakrosS), Eugenio Toribio, Sergio Garay (Sylvania), Lyvon y el propio Rosales.
Este súplica de Britches por "sentir el viento/ y ver amanecer", como reza la canción, es cantada por una coral de músicos como Silvia Gers, Rocío de Salem (Abismo), Electric Xandra (Electric Bang), Graciela Folgueras (Las Brujas), Alberto Arnau (Abismo), Enrique Rosales (Azrael), Patricia Pons (SynlakrosS) y Lyvon, voz de la versión primera de "Llora Britches".
"En el tiempo en que compusimos y grabamos la canción del 2007 -explica Yolanda Pérez- fue un reto muy difícil e increíblemente creativo, porque se partió de la letra de Ángel Padilla, que era un poema tremendamente reflexivo y hermoso. Entonces el reto consistió en crear una armonía que estuviera a la altura de la profundidad de lo que narraba el poema. Trece años después el reto también ha sido enorme pues se ha grabado y arreglado el tema en una situación de confinamiento en la que jamás habríamos imaginado que íbamos a estar. Grabar aquellas armonías con las técnicas actuales y traer la canción al presente junto a tantos artistas y con una producción tan excelente como la de Enrique Rosales ha sido una de las mejores experiencias que he vivido."
Por su parte, el autor de la letra de la canción, el poeta y activista Ángel Padilla, explica que "a los animales casi nadie les canta. Todos, en la cuarentena se animan entre sí, los animales no humanos quedan olvidados, sin remisión. Y había que reparar esto". La organización agradece a todos los participantes en el proyecto, pues es consciente de que en plena cuarentena es tremendamente dificultoso grabar, tocar y generar una canción grupal, pero confiesa que el hecho de que el "Llora Britches (confinamiento 2020" [así se puede encontrar en youtube] se haya realizado en plena cuarentena ha sido un acto deliberado. Para "mostrar que en el encierro podemos ser creativos, fraternos y éticos, y enseñar que una canción que denuncia los encierros cotidianos de billones de animales en el mundo, en pleno confinamiento humano, es algo que nos debe hacer reflexionar, para cambiar nuestra visión: la esclavitud de los animales no humanos debe abolirse, por completa justicia, de inmediato y sin negociaciones."
Las entidades de defensa animal colaboradoras son Aspac, Anadel, Actyma, Nova Eucària, Liberta, Hogar Antiespecista Miguel Quintana, Equinac, AACC Ayuda Callejeros, Santuario Arcadia, Escuadrón KAT y El Paraíso de Nora.
Una llamada a la reflexión, una llamada a una unidad más amplia, proclaman los organizadores, "la Tierra necesita de un paso realmente ético que ha de ser ahora y nunca". Nos entregan, para ello, un canto coral que nos increpa: "Acuérdate del dolor más grande que hayas sentido,/ acuérdate de aquella sangre que ardía en la luz./ Recuerda que entre esas llamas hubo un amigo./ Sangrando estoy llorando fuego y no llegas tú."