Sindicato de Riegos: Junta General sin regantes
Se ha celebrado el pasado día 29 de Noviembre, tal como establecen los estatutos, la Junta General del Sindicato de Riegos de Burriana.
En el momento en el que dio comienzo la asamblea había allí diecisiete asistentes a los que se incorporaron otros cinco que llegaron con retraso. En total veintidós personas. Si de esa cifra se restan los miembros de la Junta Directiva y los empleados del Sindicato, se puede afirmar que allí solo había, ajenos a la institución, dos, tres o cuatro personas, ni una más, algo que resulta sorprendente en una sociedad instalada en una población con un término municipal en el que hay del orden de 40.000 hanegadas, propiedad de miles de regantes.
La pregunta es ¿por qué no se preocupan los agricultores de unos temas que les atañen muy directamente? No encuentro respuesta, pero déjenme decir que resulta lamentable el “meninfotisme” de un sector con tantos problemas, que agoniza, y con tan poco interés en contribuir a hacer propuestas en busca de resolver problemas que les afectan directamente. La democracia da cauces de participación pero pasar de ellos es renunciar a las soluciones. ¿De verdad, a nadie le importa en qué se gasta el dinero su Sindicato y en cómo se organiza el riego?
Yo fui unos de los dos, tres o cuatro personas ajenas al staf que acudió a la Junta General y tomé la palabra en varios puntos para hablar de mis propuestas, algo que suelo hacer no para que se voten y se aprueben o no, lo que nunca sucede, sino para que al menos quienes dirigen el Sindicato conozcan otros untos de vista.
En el punto dos, tras la primera de lectura del acta anterior, propuse que se facilitara una copia del balance o del presupuesto a quienes la solicitaran como hace cualquier banco o cualquier entidad. Planteé que simplificaran el presupuesto para facilitar su complicada gestión al distribuir en dos balances los gastos e ingresos ordinarios y extraordinarios. También, en el apartado de gastos dije que considero poco presentable que una asociación de agricultores arruinados tenga que dedicar, como viene haciendo, seiscientos euros para contribuir a las fiestas josefinas.
En el punto tres de la orden del día me sorprendió que bajo el epígrafe “Consideraciones al riego del pasado estiaje. Planteamiento para el venidero” se propusiera de forma encubierta el “incremento de 18 céntimos la cuota por hanegada”. Hice cálculos y me encontré que lo que proponían era incrementar el coste del riego en un 6%. Dije que una decisión así debería figurar en la convocatoria de forma clara en uno de sus puntos: “Propuesta para incrementar un 6% la cuota de riego”. Dije también que sería más justo incrementar los ingresos por la vía de penalizar el precio del riego a los huertos abandonados que se siguen regando.
Finalmente en el apartado de ruegos y preguntas expuse, lo que ya he dicho en anteriores ocasiones: que se pongan a trabajar en la redacción de unos nuevos estatutos para sustituir a unos que están desfasados y llevan a confusiones y a actuaciones dispares. Para facilitarles esa renovación les dije que podrían dirigirse la Confederación para que les manden un modelo de otros Sindicatos más actualizados para sobre esa base adaptar los nuestros sin el trabajo enorme que supone partir de cero.
Otro tema que planteé fue el de vertidos ilegales de la industria a la acequia del Palau que también apuntaló, exigiendo denuncias ante el Seprona y la recogida de muestras ante un notario, otro de los dos, tres o cuatro asistentes, un tema en el que la mesa se mostró sensible y preocupada. Añadí, finalmente, que no habría que esperar a que surja un gran desastre para lamentarlo después.
La junta general que había comenzado a las siete, antes de las ocho ya había finalizado.
Dentro de seis meses habrá otra asamblea en la que si no acudimos los dos, tres o cuatro personas ajenas a la junta y a los trabajadores, pueden cerrarla en media hora o incluso menos. Con todos los de casa previamente de acuerdo en lo que proponen bastará con que la secretaria vaya leyendo rápido: Punto uno ¿Se aprueba? Sí. Ahora vamos al punto dos,… Recorrer así 7 u 8 puntos calculo que puede hacerse en menos de un minuto.