El discurso de VOX
Seguro que a Ud. le cuesta llegar a fin de mes. Seguro que ha observado que la sanidad no funciona como debería porque las listas de espera son largas y la atención en Centros de Salud deja mucho que desear. Seguro que siente preocupación porque el trabajo es cada vez más precario y porque el de sus hijos es peor ya que trabajan solo eventualmente y por horas cada vez peor pagadas. Seguro que le preocupa la seguridad y que hay cada vez más robos. Seguro que estará Ud. de acuerdo en que a los violadores y asesinos habría que encerrarlos para siempre. Seguro que Ud. piensa que las pensione pierden poder adquisitivo. Seguro que piensa que paga demasiados impuestos. Seguro que piensa que los alquileres son cada vez más caros y las viviendas están por las nubes. Seguro que no está de acuerdo en que los catalanes quieran romper la unidad de España.
Nosotros también estamos preocupados por la sanidad, por el trabajo precario, por la seguridad, por las pensiones, por los impuestos, por la deriva independentista. Nosotros sentimos las mismas preocupaciones que siente Ud.
La solución a todos esos problemas para nosotros es muy sencilla: acabar con los inmigrantes y quitar competencias a las autonomías poniendo en lo más alto la religión y la bandera. Quédese Ud. con eso y escuche nuestros argumentos avalados por el trumpismo: ¿No sabe que los inmigrantes irregulares reciben 2.000 al mes en subvenciones y en que nos quitan el trabajo? ¿No se ha preguntado de qué viven sin trabajar? ¿No sabe que los robos, los asesinatos y las violaciones son por causa de la inmigración? ¿No sabe que son extranjeros la mayoría de quienes asesinan a mujeres? ¿No se pregunta por qué se habla de violencia machista cuando hay millones de hombres que sufren denuncias falsas y eso se oculta? ¿No se ha fijado en quienes están todos los días en el ambulatorio? ¿No conoce el caso de aquella mujer que fue asaltada por un inmigrante? ¿No le preocupa que los extranjeros se apropien de nuestra cultura? ¿Y las autonomías? Nos cuestan mucho dinero y que están repletas de corruptos que roban a manos llenas. Todos son iguales. Nosotros no.
No se caliente la cabeza sobre las desgracias ajenas. No piense en las contradicciones del capitalismo y el poder de oligarquías financieras. No piense qué parte de culpa tiene la globalización y la libertad de las empresas que se valen de ella para ubicarse allí donde pueden tener mano de obra muy barata y pagar menos impuestos. No se maree pensando en las crisis cíclicas que se producen y que se resuelven bajando salarios e incrementando los costes a los más pobres y a las clases medias. No se pregunte por qué pagan tan pocos impuestos los más ricos y evaden tan fácilmente a través de las sociedades opacas ni por qué existen los paraísos fiscales. Tenga claro que siempre es mejor enfrentar pobres contra pobres que éstos, desde su pobreza, juntos, miren a los millonarios y demanden un orden y unos impuestos más justos. No cavile por qué nos hemos gastado 50.000 MM en apoyo a los bancos y nada en apoyo de los autónomos. No se pregunte por qué les han ayudado con créditos al 0% para comprar deuda de los Estados cuyos intereses pagamos entre todos. No se pregunte por qué huyen de sus países muchas personas.
No se caliente la cabeza con rodeos. Todo es así de sencillo y así de fácil. Todo se resume en acusar a los inmigrantes y de paso reclamar Gibraltar y la unidad de España. Todo se resume en los valores que encarnan el himno y la bandera. Mientras nosotros estemos en la tarea de ir ganando votantes, Ud. ponga la roja y gualda en su balcón y escuche las notas del himno de España y el “viva la muerte” de la Legión. Diríjase también a su vecinos y cuénteles lo mal que va todo. Hábleles de la última violación.
Si me pregunta Ud. en privado como solucionar todos los problemas le diré que no lo sé pero vóteme, que yo me pongo de su parte, pienso lo mismo que Ud. y siento sus mismas preocupaciones. Mientras tanto mire al inmigrante con desprecio y piense en nuestros valores. Unos valores que nada tienen que ver con los de los homosexuales, con los que llevan coleta, con los que utilizan otras vestimentas,… Hay que reconquistar España, devolver el varón al centro de la sociedad sin “yihadismos de género”, hay que negar la violencia machista y acabar con las personas LGTBI. España no es diversa y plural, España somos nosotros. Piense que echando a diez extranjeros ganaremos diez puestos de trabajo y habrá más españoles cogiendo naranjas, cuidando enfermos o en los invernaderos de Almería.
Detrás de Vox se agrupa la España de obispos como el de Córdoba o Reig Pla o José Ignacio Munilla, también movimientos como HazteOir.
PD Con Vox el mundo del capital está muy tranquilo porque saben que ellos además de muy patriotas son muy anti todo lo que suene a medidas socializantes. El millonario Trump lo sabe muy bien y por eso ha puesto a Steve Bannon en Europa apoyando a todos esos movimientos que emergen en Francia (Le Pen), Italia (Liga Norte), Alemania (Alternativa por Alemania), Grecia (Amanecer dorado)... es la mejor manera de que Europa deje de ser un espacio de valores y derechos humanos. La mejor manera de que deje de existir.
Con estos movimientos y sus soluciones fáciles nadie mira a multinacionales comoASPEN, fabricante de fármacos para el cáncer (Melfakán 2mg, Tiaguanin 40 mg, Busulfano Zing, Clorambucilo 2 mg, Mecaptopurina 50 mg 50 mg) que se han dedicado a incrementar desde el 2014 los precios de productos básicos el 2.986% (en el caso del Clorambucilo. Sí, he escrito casi tres mil por cien) ¡y aún quieren más! Productos todos ellos necesarios para tratar varios tipos de cáncer. Para sus objetivos han utilizando tácticas como el desabastecimiento con el fin de forzar al gobierno a que acepte mayores subidas de precios o se vea obligado a adquirirlos en otros países. Pero, como diría R. Rato “¡es el mercado, amigo!” y eso sí que es sagrado, y ahí, y en la libertad de capitales y en los paraísos fiscales no está el problema.
LA DERIVA DE TRUMP
Tras la “modificación”, con irrelevantes retoques, del acuerdo de Libre comercio con México y Canadá. Tras el encuentro con el líder de Corea del Norte donde no ha conseguido nada. Tras su escalada de aranceles a China que no ha impedido que el déficit comercial siga creciendo. Tras perdonar al príncipe heredero Saudita y dictar una orden internacional contra la vicepresidenta de Huawei por haber negociado con Irán. Tras todo eso, el hombre más torpe de cuantos han ocupado la Casa Blanca, asiste al deterioro de una potencia que va en camino de perder su supremacía. Lo avalan los datos: Huawei ha superado a Apple en la venta de ordenadores y la tecnología 5G, así como en robótica y en investigación espacial. Pero ir dando palos de ciego, a la deriva, es más fácil que afrontar los retos que tiene ante sí un presidente inepto perseguido por silenciar con sobornos a mujeres implicadas en sus escándalos sexuales. Su ignorancia e incapacidad son, a la vez, un serio peligro para todos. Mejor que no llegue lo peor.
Lo decimonónico y rancio son los discursos y los gobiernos dictatoriales y populistas, aunque resurjan de nuevo en demasiados países. Anticlericalismo en utilizar a Dios como lo hace Bolsonaro en Brasil o como se hacía en las Cruzadas Lo nuevo y lo frágil es la democracia y el respeto a la diversidad.