Las amenazas tienen nombre, se llaman Qim Torra
Y tienen como apellido, la fecha de caducidad fijada por el Nazi-onalista President de la Generalitat de Cataluña, todo un ultimátum planteado al Gobierno de Pedro Sánchez.
Según la intervención del segundo día, del 1 de octubre del Año de la Victoria - definición del año que ha hecho Torra - durante el cual el independentismo, ha logrado sus dos grandes fracasos: El del “Proces”, y la fractura social y política de los artífices políticos de esta catástrofe histórica, que es la Cataluña actual. Quim Torra ya ha establecido lo que tiene que hacer el Gobierno socialista de España y su Presidente Pedro Sánchez, en el plazo de un mes.
Es decir, según este “espantapájaros político” que ha fijado fecha, ha dado un ultimátum al Gobierno de Pedro Sánchez, exigiendo una propuesta de referéndum antes de noviembre, y si el Ejecutivo no adopta actitudes valientes, y no hace una propuesta, - naturalmente que le convenga - al independentismo, éste no podrá garantizar ningún tipo de estabilidad al Gobierno, ha advertido en tono dictatorial el President de la Generalitat.
Y este “Chulo verbal” de Torra, además como prueba de su hipocresía, se ha permitido presumir de haber sido “pacientes con el tripartito del 155”, después de lo que se les ha hecho -se atrevió a afirmar – recordando a los presos políticos y los exiliados.
Pero el Gobierno de España, no lo ha pensado mucho, ha sido de respuesta inmediata y radicalmente clara y contundente. El Gobierno no ha tenido que esperar a que se “consumiese la fecha de caducidad fijada por el President Torra”.
“Autogobierno y convivencia. No a la Independencia. No aceptamos ultimátum” ha contestado inmediatamente la Ministra portavoz Isabel Celaá.
Así de claro, el Gobierno lo ha expresado: “No acepta ni chantajes ni ultimátums”. Así que menos lobos caperucita,-me permito decirle - al Nazi-onalista Torra.
Ahora ya lo sabe “Torra el amenazador”, que ante la respuesta tan clarividente que le ha dado el Gobierno de España, solo tiene dos opciones: “O acepta el Auto-gobierno y la convivencia” ó “Intenta por segunda vez el asalto al Estado de Derecho y laConstitución”.
En mi modesta opinión, no cabe esperar ninguna de las dos únicas opciones que Torra podría asumir.
Ni aceptara el marco de convivencia y el auto-Gobierno de Cataluña, que le propone el Gobierno, lo que supone mediante la negociación con el mismo, la potenciación de los valores del catalanismo, lengua, cultura y tradiciones en el marco del Estado de Derecho, y la renuncia a declarar la Independencia el Estado Catalán en forma de República.
Pero tampoco va a proceder, - pienso yo - a repetir un calco de las actuaciones del fugado expresident Puigdemont, y por las que tendría que huir a Bélgica a hacerle compañía a su President.
No Torra, a pesar de la crisis del Independentismo, no hará ni lo uno ni lo otro, seguirá con sus amenazas de desestabilización del Gobierno, e incluso las materializará en el Congreso de los Diputados, votando en contra de todas las propuestas que tengan su origen en el Gobierno de Pedro Sánchez.
Si, eso es, a mi juicio, lo que va a tratar de llevar a cabo. Porque ese es el único fin que tiene el Independentismo, desestabilización del Gobierno, y “seguir jaleando a los irreconciliables con los españoles” para que sigan “Apretando” contra el Estado de Derecho que hoy tenemos en nuestro país.
Y ante la verborrea mental de Torra y de las actuaciones de los Casado y Rivera, que no han dicho ni una sola palabra de denuncia a las amenazas que le han realizado al Gobierno, y que solo vienen a alentar también el “Cuanto peor mejor” para sus desmesuradas ambiciones, que son únicamente el acabar con el Gobierno de Pedro Sánchez y que se convoquen la elecciones. La respuesta a tales actitudes que les ha dado Pedro Sánchez, es bien convincente para todos los españoles sensatos: “Si la oposición, quiere hace ruido, que lo haga. Nosotros a gobernar”.
En esa respuesta, dada a los Casado y Rivera antes del 1 de octubre en Cataluña, hoy creo que Torra puede sentirse también incluido, porque sus amenazas la han hecho acreedoras a esta respuesta de Pedro Sánchez.
Y lo que va a suceder es que la prolongación de la crisis en Cataluña y el boicot desde la Mesa del Congreso y del mismo Senado, está generando un clímax que los españoles no nos merecemos, ni lo necesitamos. Pero en mi opinión, la inmensa mayoria de quienes hemos sufrido los azotes económicos y sociales a nuestros derechos, que nos impusieron los años del Gobierno de Mariano Rajoy, no deberíamos confundirnos por el Independentismo, ni tampoco por las “Derechas que configuran el PP con su agraciado Masterizado Casado, y un Rivera que también ha perdido no sé cuantos Doctorados de su Curriculum”.
Que no nos agoten, ni nos confundan. Porque a estos mozalbetes les falta, algo muy elemental pero indispensable para la política: “Tener un proyecto, y ser honrado”.
Por eso, hay que apoyar hoy, la acción del Gobierno, de Pedro Sánchez y de cada uno de sus Ministras y Ministros, que en 100 días han hecho más a favor de la solución de problemas, que lo siete años de legislatura de Mariano Rajoy creándolos.
Y si mañana - es un suponer – se hace necesario convocar elecciones generales como consecuencia de la ingobernabilidad que han impuesto la derecha PP y Ciudadanos junto a las actuaciones del Nazi-onalista Torra. La hoja de ruta de los españoles debe estar claramente establecida, con el voto a las candidaturas del PSOE en todos los ámbitos que tengan lugar los comicios, locales, autónomos, Europeos y las generales en nuestro país.
Así han sido mis análisis, así lo he reflexionado, así lo creo y por eso, así lo expreso.