El paro. La mayor lacra social
Ha caído como un verdadero mazazo. No por esperado, ha sido menos estremecedor. Hemos rebasado la barrera de los CUATRO MILLONES de parados en España y el gobierno socialista continúa en el limbo.
El profesor Velarde en un arranque de sinceridad apunta hoy en el periódico El Mundo “El paro puede continuar creciendo” y dice más, “el gobierno no está tomando las medidas adecuadas”, etc. Es un artículo con lenguaje llano, que no nos deberíamos perder, pero por encima de todo es la propia “voz de la conciencia” de quienes estamos asistiendo de manera impasible al crecimiento de lo que yo vengo en denominar “la mayor lacra social que azota a España y a todos los españoles”.
Y en este difícil contexto es especialmente alarmante la situación que se produce en algunos municipios de nuestra provincia que rebasan con creces la media nacional de paro. Si hoy en el conjunto de España, nos situamos alrededor del 17.5 % de paro, según la EPA, algunas poblaciones de nuestra provincia están afectadas de forma especial. Onda supera el 21% de paro respecto de su población en edad de trabajar, y lidera de forma alarmante el incremento de este indicador en la provincia de Castellón.
El paro, esa lacra social, que la denigrante política de Zapatero en un contexto de dificultades globales, nos ha traído al conjunto de los españoles, se ha cebado una vez más en una población, como también por la inacción de los gobiernos del PSOE, ocurrió en La Vall, en mi pueblo, cuando el sector del calzado toco a su fin.
En las dos ocasiones observo la misma actitud, el error sistemático de los gobiernos de izquierdas locales en no haber diversificado la economía de sus ciudades y en implantar la prepotencia y la falta de visión de futuro como forma de hacer política.
Pensar que todo es eterno y no haber reinvertido los beneficios de tanto desarrollo en la diversificaron de la economía local, no prestando atención a sectores modernos de la economía productiva es el mayor error que se puede cometer. Este es el momento de la diversificación de las economías locales, este es el momento como están haciendo en La Vall de liderar un pacto territorial por el empleo, que exceda el ámbito local y que no mire solo al“propio ombligo de la ciudad” sino que tenga en cuenta todas las sinergias que una comarca potente como la nuestra tiene.
Por eso hoy quiere dejar aquí patente el valor de Isabel Bonig y David Guzmán que han empujado un proyecto de conjunto y de futuro para intentar menguar los efectos demoledores de esa lacra social, que es el paro y, que Zapatero debe apuntarse en su debe como uno de los peores servicios que un gobernante puede hacer a su país.
La Diputación de Castellón, también consciente de lo que se nos venía encima, ha creado un departamento de Promoción económica que con mucha ilusión por mi parte tengo bajo mi competencia y que va a seguir planteando propuestas de mejoras del empleo para la provincia como hasta ahora hemos venido haciendo pero con más dedicación de esfuerzos si cabe.
Es por tanto una apuesta clara desde La Vall y desde la Diputación para corregir un camino torcido, como “los renglones de Dios”, por un presidente del Gobierno (cuanta razón cuando Pío Moa le describió como “un iluminado en la Moncloa”) que no sabía de economía y parece que al final no va a saber tampoco de política social. Quizás no sepa de casi nada.
Porque la mejor política social es crear empleo digno y el gobierno del PSOE lo está destruyendo a mazazos. Mientras, Colomer habla de repensar el modelo económico de Castellón. ¡Qué miedo! Porque la repensada de sus compañeros de partido en el gobierno de la nación nos está saliendo muy cara. El problema de los socialistas es que siempre tienen que repensar todo porque no tienen proyecto para nada.
El PSOE no es partido socialista obrero español, es el partido del paro, solo sabe crear desempleo, gastar y gastar del dinero de todos. Que mejor politica social que el tener empleo ¿? De eso los gobiernos del PP saben mucho, y son un claro ejemplo de buena gestión. Con los gobiernos del Sr. Aznar, los trabajadores estabamos mejor que ahora. Así que hagamos memoria. Saludos