TÚpatria se posiciona sobre el cambio climático

Desde TÚpatria defienden la “Variabilidad Climática Natural” del planeta Tierra (atmósfera, hidrósfera, criosfera, litosfera y biosfera) frente al denominado “Cambio Climático Antropogénico” producido única y exclusivamente por la acción de gases de efecto invernadero GEI (CO2 / CH4 / NO2 / O3 / Vapor H2O /CFC) ya que sería ilógico pensar que a partir del inicio de la industrialización de forma aproximada en 1830, todos los procesos endógenos y exógenos del planeta, se hubieran detenido en el tiempo y apareciera en su lugar un hiato geológico.

Asumen que la “Variabilidad Climática Natural” forma parte del proceso evolutivo del planeta, pero también asumen por prudencia y responsabilidad ante la ausencia de modelos matemáticos con menos incertidumbre que los actuales, y a la espera de una mejor evidencia científica disponible y fiable de dichos modelos, que las emisiones antropogénicas tengan un cierto efecto catalizador en el delicado equilibrio del clima, situaciones ante las cuales el planeta tierra tiende a restablecer su equilibrio o adaptarse evolutivamente a nuevas situaciones, pero que a escala temporal del ser humano son muy difíciles de demostrar en dicho espacio de tiempo.

El posicionamiento de TÚpatria referente al Cambio climático es la coexistencia de la “Variabilidad Climática Natural” junto al “Cambio Climático Antropogénico”, es decir una simbiosis con el clímax climáticoreinante, siendo éste clímax un “estado climático estabilizado” durante largos períodos de tiempo en un aparente estado de bienestar, pero que al variar en un corto espacio de tiempo produce una alarma social exponencial dando lugar a preguntas de no fácil respuesta y en las que se generan dudas razonables.

De no ser así, el único punto de convergencia de TÚpatria con los defensores a ultranza del cambio climático antropogénico sería la innegable realidad científica que sobre la salud humana tienen los contaminantes atmosféricos emitidos por determinadas actividades humanas.

El cambio climático es un debate abierto, sujeto a intereses políticos, económicos y lobbies ideológicos con intereses particulares, algunos de ellos especializados en exaltar en beneficio propio la controversia sobre el “cambio climático” de origen exclusivamente antropogénico, negando de facto la evidencia científica de que las variaciones climáticas acaecidas en el planeta durante 4.600 millones de años están relacionadas directamente con procesos endógenos y exógenos como: Manchas solares / Variaciones en la órbita terrestre / Variaciones naturales en la concentración de CO2 y Metano / Meteoritos / Tipping Point y la Teoría del Control / Deriva Continental / Corrientes Oceánicas Termohalinas o Cinta Transportadora Oceánica / El Niño y la Niña / El Campo Magnético Terrestre / La Atmósfera Terrestre / Retroalimentación y Factores Moderados / Incertidumbres de Predicción / Los Océanos / Sumideros de Carbono y Acidificación.

El término cronológico “antropoceno” propuesto por los defensores a ultranza del cambio climático no es aceptado por ni por la “Comisión Internacional de Estratigrafía CIE” ni es ratificado por la “Unión Internacional de Ciencias Geológicas UIGC” ni validado en el último Congreso Mundial de Ciencias Geológicas; entre otros aspectos porque su duración del 0,000005%-0,000004% en relación a los 4.600 millones de años del planeta no tiene entidad cronológica ni científica desde el campo de la Estratigrafía y la Sedimentología además de tener que cumplir con las normas de la “Guía estratigráfica Internacional” algo que no cumple para entronizarlo ni como para otorgarle posicionamiento geocronológico ni paleoclimático entre otros, por lo que es considerado por la gran mayoría de la comunidad internacional geológica como una intención de declaración política más que una propuesta científica.