Bernabé: “Sueca gana espacios verdes y de convivencia gracias a la apuesta sostenible del Gobierno de España”

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha mantenido esta mañana una reunión con el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Sueca, en la que se ha explicado el proyecto de humanización de la N-332 a su paso por Sueca. Esta obra cuenta con un presupuesto de 4,4M€ provenientes de los fondos Next Generation.

Según ha señalado Bernabé, con esta iniciativa “Sueca ganará en espacios verdes y de convivencia gracias a la apuesta sostenible del Gobierno de España”, en línea con lo que marca Europa y la Agenda 2030.

La delegada ha agradecido al alcalde de la ciudad, Dimas Vázquez, “la cooperación leal” y “el trabajo conjunto” para “humanizar la N-332 y convertirla en un auténtico bulevar”. Se eliminará de esta manera, “un punto negro, una auténtica barrera que se transformará en un elemento de cohesión para la localidad”. Así, se integra esta travesía que durante años ha dividido la ciudad en dos pero, sobre todo, “se hace desde una perspectiva sostenible, inclusiva y accesible, reduciendo el espacio destinado al tráfico de vehículos y fomentando el tránsito de peatones y bicicletas”.

El proyecto tiene por objeto el acondicionamiento de la carretera entre los kilómetros 252,1 y 257, reduciendo el espacio destinado al tráfico rodado para integrarla la vía en el espacio urbano y facilitar el tránsito de peatones y bicicletas. Para ello, la intervención contempla la construcción de glorietas, la disminución de anchura de carriles, la instalación de una mediana semifranqueable para canalizar el tráfico, la implantación de carriles bici y aceras accesibles y la creación de pasos peatonales elevados. Además, se rehabilitará el firme mejorando sus características fonoabsorbentes y se renovará el alumbrado del tramo mediante iluminación led.

El programa de humanización de travesías, que cuanta con una inversión total de 105 M€ de fondos europeos, con los que promueve la configuración de ciudades que devuelven espacios a otras formas de movilidad alternativa al automóvil y, por tanto, “ciudades más sostenibles, saludables y con una mejora en la calidad de vida de los vecinos y vecinas”.