Sax suspende las fiestas de San Sebastián, los Moros y Cristianos en honor a San Blas, Santa Eulalia y el Carnaval, ante la gran contagiosidad de la sexta ola del Coronavirus

Sax suspende la festividad de San Sebastián la semana que viene, las fiestas de Moros y Cristianos en honor a San Blas, que tradicionalmente se celebran del 1 al 5 de febrero, la festividad de Santa Eulalia así como el Carnaval.

El Ayuntamiento ha adoptado esta decisión después de consultar con las autoridades sanitarias, y de mantener reuniones con las comparsas y responsables de la Mayordomía, siguiendo el mismo criterio que se ha seguido hasta ahora. “Con la suspensión del Cabildo el 26 de diciembre ya lo hicimos así” ha señalado la alcaldesa, Laura Estevan, quien ha explicado que  “si hemos mantenido las actividades dirigidas a los niños en Navidad, Año Nuevo y Reyes es porque desde Sanidad nos dijeron que no había problemas con estos actos y hemos actuado como la inmensa mayoría de poblaciones”.

Laura Estevan se ha referido también a una reciente consulta a los responsables de Salud Pública de los que depende nuestra población, quienes “indicaron claramente que la recomendación es que no se celebren porque el principal problema radica en los cuartelillos al tratarse de espacios cerrados, en muchos casos poco ventilados, donde es muy frecuente que se relajen las medidas de autoprotección y, por tanto, haya más peligro de contagio”.

Estevan ha señalado que ha habido un par de reuniones con asistencia de todos los miembros de la Corporación Municipal, con los responsables de las comparsas, así como de la Mayordomía de San Blas y la parroquia de la Asunción. Entre las comparsas hay opiniones diferentes respecto a la suspensión de las fiestas y “decidieron que fuera el Ayuntamiento el que tomara esta decisión y así lo hemos hecho, pensando en todo momento en la salud de los sajeños y sajeñas, sopesando las consecuencias para nuestro tejido productivo que también es importante y atendiendo a nuestro sentido de la responsabilidad”.

Precisamente la alcaldesa ha indicado que se ha pulsado también la opinión a diferentes empresas de distintos sectores del tejido productivo de la población, para barajar la posibilidad de estudiar el traslado de las fiestas unas semanas más tarde, expresada por algunas personas pero “nos han respondido que abocaría a una situación más complicada que la que ya tienen muchas empresas con numerosas bajas médicas lo que está retrasando y dificultando sacar adelante su producción”.

Por tanto será el segundo año consecutivo que no se celebren las fiestas de San Blas. El precedente a una situación de no celebración de los Moros y Cristianos es la Guerra Civil española, durante los años 1937 y 1938.

“No ha sido una decisión fácil porque sabemos lo que representa San Blas para Sax”, ha indicado la alcaldesa quien se ha referido a la gran cantidad de gente que participa en las mismas: “No son solo los 3.000 festeros que participan durante cinco días, sino también los músicos que vienen de fuera y el público que atraen estas fiestas de otras localidades”, ha concluido la regidora.