SANIDAD Y SALUD

La saturación en la atención primaria evidencia la falta de sanitarios: se necesitan 4.000 enfermeros más

ELPERIODIC.COM - 21/12/2021

El CECOVA calcula que se precisa una plantilla superior a 20.000 enfermeros para cubrir los cuidados en la Comunitat Valenciana

Con los enfermeros exhaustos por el creciente aumento de cuidados que deben asumir por la sexta ola de contagios y por la vorágine del proceso de vacunación Covid-19, desde el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA) se aprovecha el final del año 2021, a modo de balance, para hacer un llamamiento a la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública con el fin de que contrate a más profesionales y establezca una fórmula (a través de oposiciones OPE más frecuentes) para que las plantillas consoliden a las miles de enfermeras/os eventuales que sufren unas condiciones laborales de absoluta precariedad.

En estos días en los que la Enfermería de Atención Primaria está desbordada y las UCI de la Comunidad Valenciana rozan ya el límite de su capacidad, desde el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana se recuerda que el último Informe ‘Desempleo y otros indicadores laborales de los profesionales de Enfermería en la Comunidad Valenciana’, realizado por el CECOVA, arroja que para alcanzar el objetivo de llegar a la tasa de profesionales de Enfermería por cada 1.000 habitantes que hay en el Sistema Nacional de Salud, la Conselleria de Sanitat Universal y Salut Pública debería incrementar el número de profesionales de Enfermería en la Comunidad Valenciana en una cantidad que oscila entre las 3.000 y las 4.000 nuevas enfermeras/os, por lo que el Servicio Valenciano de Salud debería alcanzar, como mínimo, un número de profesionales de Enfermería que debería rondar las 20.000 o las 21.000. Se debe tener en cuenta que actualmente la salud valenciana dispone de 16.800 enfermeras/os en activo.

El presidente del CECOVA recuerda que, estos momentos de saturación clínica en Atención Primaria y Hospitalaria, “es evidente la necesidad de incrementar el número de profesionales de Enfermería que trabajan en nuestra comunidad autonómica dado el progresivo envejecimiento de la población y el incremento de las enfermedades crónicas, siendo necesario reorientar el Sistema Valenciano de Salud hacia una mayor inversión en políticas de cuidados, así como también debe ser prioritaria la creación de nuevos recursos sociosanitarios (como plazas residenciales de tercera edad) para desarrollar adecuadamente el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD)”.

Asimismo, “es ineludible la necesidad de implementar otras actuaciones reivindicadas por el CECOVA, como sería la creación de puestos de trabajo de enfermera escolar en los centros educativos valencianos, así como la creación de plazas de enfermeras/os especialistas en la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública”, según Juan José Tirado, quien advierte de que las/os enfermeras/os “han sido y son imprescindibles en la actual pandemia y otras futuras pandemias que pudiesen venir y la presente campaña de vacunación contra la Covid-19 y otras futuras y probables campañas de vacunación que pudiesen ser necesarias exigen un incremento considerable del número de profesionales de Enfermería en activo”.

Plan de retorno de profesionales

Para CECOVA es evidente que la puesta en marcha de la mayoría de las actuaciones referidas implicaría la cobertura necesaria en hospitales y Atención Primaria con profesionales de Enfermería en la Comunidad Valenciana, siendo necesario también, en dicho supuesto, “implementar un plan de retorno para los/as enfermeras/os valencianos/as que emigraron buscando un empleo o persiguiendo mejores condiciones laborales ya que sería necesario el aumento sustancial del número de enfermeras/os en activo en nuestra Comunidad”, destaca el presidente del CECOVA.

Como consecuencia de este hecho objetivo, Juan José Tirado insta a plantear “el debate de si procede incrementar las plazas de Enfermería en las Universidades de nuestra Comunidad, siempre y cuando fuese factible aumentar las plazas para realizar prácticas universitarias en los centros sanitarios y sociosanitarios tanto públicos como privados de la Comunidad Valenciana”.

Pleno empleo con precariedad laboral

En cuanto al impacto de la pandemia Covid-19 en el empleo, la Enfermería sólo ha registrado paro residual durante este fatídico año, por lo que puede afirmarse que la profesión cuenta con pleno empleo, hasta el punto de que en algunos momentos han faltado profesionales para cubrir la demanda asistencial. Sin embargo y paradójicamente esta ausencia de desempleo provoca un efecto perverso porque un número muy elevado de enfermeras/os de la Comunidad Valenciana ocupa puestos con alarmante precariedad laboral, con contratos temporales de poca duración y/o jornadas a tiempo parcial. Esta reducción del paro, además, ha sido de carácter coyuntural como consecuencia de la crisis de la covid-19 que ha azotado el sistema sanitario durante el último año.

Categoría A1

Respecto a acceder a la categoría laboral A1, el CECOVA recuerda que las enfermeras sólo pueden acceder al grupo laboral A2 en la Administración Pública, y no al A1, al que están adscritos profesionales con una titulación idéntica. Enfermería es un grado universitario de cuatro años, con 240 créditos de formación, lo mismo que otras carreras como Derecho, Psicología, Economía o Periodismo.

No en vano, mientras que un economista, un abogado, un físico o un psicólogo pueden ser gerentes de un hospital, una enfermera tiene vetado ese puesto, pese a estar preparada para ocupar el cargo, tener competencias en gestión y tener un título universitario absolutamente equiparable a todos grados universitarios.

“Las implicaciones de este perjuicio inciden directamente sobre el desarrollo profesional y el salario que reciben las enfermeras. De hecho, les impiden, por ejemplo, acceder a determinados puestos dentro del ámbito sanitario. Paradójicamente la Administración permite a enfermeras/os desempeñar puestos de director o gerente, pero sólo en funciones, porque cuando se convoca la plaza se impide a las/os profesionales de Enfermería ocuparla”, afirman desde el colegio.

Desde 2007, las enfermeras tienen un título universitario idéntico al de los profesionales que conforman el grupo A1. Sin embargo, cuando se incorporan a la Administración Pública se les adjudica el Grupo A2. Así, a las enfermeras se les niega el mismo reconocimiento laboral que también se refleja en sus peores salarios.

Otras demandas profesionales de Enfermería

De igual modo, se exige la derogación inmediata de las funciones anacrónicas que siguen vigentes a pesar de la derogación del Estatuto de Personal Sanitario no Facultativo de las instituciones sanitarias de la Seguridad Social de 1973 que detalla a la Enfermería como “ayudante del médico”.

El CECOVA también solicita que se reconozcan todas las especialidades de Enfermería que todavía carecen de esta consideración y que se establezcan los mecanismos necesarios para evitar que se produzca el alarmante aumento de intrusismo profesional que ha ido creciendo durante la pandemia Covid por falta de personal.

La prescripción enfermera es otra de las reivindicaciones del CECOVA, especialmente, para que se generalice como actividad esencial del sistema de salud y se fijen los protocolos necesarios para que su puesta en marcha sea real. Una demanda similar a la de consolidar la figura de la enfermera escolar en todos los centros educativos, cuya relevancia se ha puesto de manifiesto con la pandemia Covid-19, tanto en la promoción de la salud como en la vacunación. Un extremo que debe buscar fórmulas para establecerse, de forma permanente, como herramienta social, como ocurre con la lucha contra las agresiones a las/os enfermeros que debe corregirse con más medidas de control en los entornos clínicos. 

Respecto a las reclamaciones de carácter laboral se desde el CECOVA se pide fijar una jubilación voluntaria y anticipada a los 60 años con 25 años de servicios y, por último, acabar con la precariedad laboral que continúa siendo un problema crónico de la Enfermería.

Agresiones a enfermeras

En el último año computado hubo 15 partes de agresiones a enfermeras comunicados al Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana. Por colegios provinciales de Enfermería, en Castellón hubo 4 agresiones, Valencia registró 8 y Alicante 3. De los 15 ataques, 8 han desembocado en denuncias en los juzgados. Por lugares donde se han producido estos actos de violencia se ha de destacar que en hospitales hubo 4, en centros de salud 7, durante asistencias del SAMU 2 y en los domicilios de pacientes 1.

Pinchazos

Las enfermeras se erigen como las profesionales que más sufren accidentes percutáneos, especialmente pinchazos accidentales, según el último Registro de Exposiciones Biológicas Accidentales (REBA) de la Conselleria de que incluye los datos de enero hasta abril del presente año.

En concreto, el personal de Enfermería asume el 61,52% de las exposiciones percutáneas, con el pinchazo como la lesión más frecuente. Estos accidentes también son padecidos, aunque en menor grado, por los médicos (22.52%) y por los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (9,40%).

Las/os más contagiadas por Covid

El CECOVA también vuelve a rogar a la consellera de Sanidad Universal i Salut Pública, Ana Barceló, que extreme las medidas de prevención contra los contagios por la Covid-19 en los ámbitos clínicos, tras conocerse que la Comunidad Valenciana vuelve a ser la región con más sanitarios contagiados durante los últimos meses de pandemia. 

Según la última estadística publicada por el Ministerio de Sanidad, un total de 15.495 sanitarios valencianos han contraído el virus desde el 11 de mayo hasta el pasado 25 de noviembre. Una cifra que ha crecido respecto al recuento anterior de agosto cuando se contabilizaron 14.313 sanitarios con el coronavirus en las provincias de Valencia, Alicante y Castellón.

El número de 15.495 trabajadores/os de sanidad contagiados resulta desorbitado, teniendo en cuenta que hay otras comunidades autónomas con más población que han presentado menos contagios: Cataluña ha sufrido 15.440 contagios entre los sanitarios; en Andalucía, 13.006 profesionales han sido infectados por el coronavirus; y en Castilla y León, 9.824 profesionales han dado positivo por covid-19. Y, por último, llama poderosamente la atención que la Comunidad de Madrid, con un importante volumen de habitantes, haya registrado 8.677 sanitarios contagiados, considerablemente menos que la Comunidad Valenciana.