Certifican la primera sal marina ecológica producida en Santa Pola
La sal, controlada y certificada bajo el estándar de la producción ecológica, da garantía al consumidor sobre la forma de producción y envasado
El Comité de Agricultura Ecológica de la Comunitat Valenciana (CAECV), entidad encargada del control, la certificación, representación y defensa de los productos ecológicos, además de la investigación y la promoción de éstos, ha emitido el primer certificado de conformidad para la sal marina ecológica producida en las Salinas Bras del Port de Santa Pola (Alicante).
Esta salinera ya contaba con una gama ecológica bajo un referencial privado. Ahora, con entrada en aplicación del nuevo Reglamento (UE) 2018/848 el pasado 1 de enero, la sal marina se incluye en su campo de aplicación.
Hasta ahora, el Reglamento no permitía el uso de la Euro Hoja (sello que garantiza que un producto es ecológico) en el etiquetado de la sal, a menos que se tratara de un condimento (sal mezclada con hierbas ecológicas) No obstante, algunas certificadoras de carácter nacional y privado, sí que la certificaban como producto ecológico.
Es el caso de INTERECO, la entidad que agrupa a las catorce autoridades de control ecológico públicas de nuestro país y entre las que se encuentra el CAECV, ha estado certificando sal ecológica en base a su referencial desde 2012, atendiendo así a la demanda de los productores y de los consumidores que lo solicitaban.
La sal marina producida en Santa Pola será certificada por las autoridades de control público
No solo empresas que producen sal marina, sino también empresas que envasan, comercializan y distribuyen sal marina ecológica, han cambiado al sistema de control que establece el reglamento europeo de producción ecológica. En la Comunitat Valenciana y catorce comunidades autónomas más, el sistema de control público va a ser el encargado de certificar este producto, como es el caso del CAECV.
El pasado 1 de enero de 2022, entró en vigor del nuevo Reglamento de Producción Ecológica, que pretende reflejar la evolución del sector a su rápido crecimiento, garantizando una competencia leal para los agricultores y, al mismo tiempo, evitar el fraude y mantener la confianza de los consumidores.
El citado reglamento extiende el ámbito de aplicación de las normas de producción ecológica a una lista más amplia de productos, entre los que se ha incluido la sal marina y otras sales, ya que Europa ha detectado que existe una gran demanda al estar producida bajo técnicas naturales y porque su producción puede contribuir al desarrollo de zonas rurales.
Desde 2022, se ha incorporado al ámbito de aplicación, por lo que las autoridades de certificación van a poder certificarla, dando continuidad a la certificación emitida por INTERECO hasta el momento.
La norma europea de sal marina y otras sales para alimentación y piensos, está siendo ampliamente debatida en el seno de la Comisión. Inicialmente se han publicado los objetivos, principios básicos, normas de producción y etiquetado, en base a los cuales certificar la sal marina.
La sal, controlada y certificada bajo el estándar de la producción ecológica, da garantía al consumidor sobre la forma de producción y envasado, y sobre el cumplimiento de los objetivos de la producción ecológica.