La Conselleria de Educación rectifica y acepta las recomendaciones del Síndic de cambiar de ubicación el transformador de Begoña
"Queremos recordar que fue la propia Conselleria la que ha cometido un error al diseñar la obra del salón de actos de la escuela en baja tensión, cuando en la zona todo el suministro es en media tensión. En lugar de subsanar este error, lo agravaron instalando un centro de transformación junto al colegio que, como indica el Síndic de Greuges, “no resulta el lugar más adecuado, ya que nos encontramos ante unas instalaciones potencialmente peligrosas por el riesgo de producirse en las mismas incendios, explosiones, ruidos o vibraciones”".
La presión ciudadana y política ejercida en este asunto han hecho que la Conselleria de Educación, mediante escrito remitido al Síndic de Greuges “acepte la recomendación, en todas aquellas situaciones en que se puedan adoptar otro tipo de medidas sustitutivas de la ubicación de un centro de transformación eléctrica de media o alta tensión próximo a un centro escolar, y optaremos sin duda por ponderar y proteger la comunidad educativa.”
No obstante, el Grupo Municipal Socialista estará pendiente de la materialización de dicha medida. "Por desgracia, las promesas de esta Conselleria no siempre se hacen realidad".
El Grupo Socialista quiere, por último, "agradecer y reconocer la labor del ciudadano que impulsó nuestras actuaciones en este tema".
La Consellería no quiere cambiar los transformadores, dicen que no son perjudiciales. El Ayuntamiento de Sagunto gobernado por el PP y con el apoyo del partido segregacionista SP, no ha aceptado una moción del grupo socialista para que se reclamara a la Consellería de Educación el que se cambiara de ubicación. Sin duda no hay más que acceder a hemerotecas y estudios epidemiológicos para comprobar la incidencia de molestias entre los niños, llegando incluso a leucemias, que se ven expuestos a campos eléctricos producidos por los transformadores, y la enorme cantidad de transformadores que se incendian cada año en España, con el consiguiente riesgo para los escolares, puesto que esta unidad de transformación está situado a un metro escaso de la pared del centro donde acuden a diario cientos de escolares. La Consellería no ha hecho ningún caso del Sindic; el Ayuntamiento tampoco. Sin duda los que salen perdiendo, son los niños, que se ven expuestos a un peligro fácilmente evitable.