Rocafort, ciudad Machado, homenajea a su vecino ilustre
El V Aula Juan de Mairena, las jornadas en torno a Antonio Machado que este fin de semana ha acogido la Casa de Cultura de Rocafort, se clausuró ayer con el objetivo cumplido de dar a conocer el fecundo legado que el poeta dejó en la localidad, en donde residió entre 1936 y 1938.
Este encuentro, que ha reunido desde el viernes a reconocidos investigadores, literatos e historiadores para analizar la obra del autor, ha sido el resultado de meses de trabajo del Consejo Sectorial 'Rocafort, Ciudad Machadiana', formado por asociaciones cívicas de la localidad y coordinado por la concejalía de Cultura.
De esta forma, el alcalde, Víctor Jiménez, agradeció en el acto de clausura el "entusiasmo y activismo" del grupo en el diseño del programa y en su labor por divulgar la estancia de este vecino ilustre en la localidad. "Estas jornadas son el mejor homenaje que podemos rendir. Llenan un vacío incómodo para muchos porque no entendíamos cómo durante tantos años no podía reivindicarse la figura de Machado en Rocafort", afirmó Jiménez.
El alcalde, que el viernes se reunió con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para tratar la compra de Villa Amparo -el lugar de residencia del poeta-, apuntó que el Ayuntamiento está trabajando con el resto de Administraciones y con la Red de Ciudades Machadianas para que sea un centro de titularidad pública.
Por su parte, Enric Albiach, en representación del Consejo Machado de Rocafort, recordó la figura de Rafael Arnanz, el que fuera secretario general del Ayuntamiento de Valencia y vecino de la localidad, fallecido a principios de mes, de quien destacó que era gran amante de Machado, además de amigo, colaborador y persona comprometida.
Machado en la Guerra y el refugio
El sábado, Manuel Aznar Soler, Catedrático de Literatura Española Contemporánea de la Universidad Autónoma de Barcelona y fundador del Grupo de Estudios del Exilio Literario (GEXEL), ofreció una ponencia en torno al II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura, de 1937, que tuvo en Valencia una de sus sedes. Aznar remarcó, entre otros aspectos, que el Congreso favoreció el "compromiso moral" de los escritores antifascistas de todo el mundo para defender con la pluma los ideales de la República.
A continuación, Angela Nzambi, escritora guineoecuatoriana y miembro de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado del País Valencià (CEAR-PV), reflexionó sobre la situación de los refugiados en la actualidad, que sufren, dijo, "constantes obstáculos ante su derecho de asilo recogido en los Derechos Humanos".
La compañía de teatro A stessa voce, dirigida por Jesús Pérez Dolz, cerró la jornada con la representación de 'Machado a escena', una adaptación personal y original sobre la obra del poeta.