El Síndic de Comptes llevará al Tribunal de Cuentas el pago de 2'4 millones de euros sin justificar
El Síndic de Comptes ha rechazado las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria sobre las irregularidades contables del año 2014 bajo gestión del PP y presentará una denuncia ante el Tribunal de Cuentas, máximo órgano de fiscalización estatal, sobre la gestión económica que realizó el anterior gobierno popular, encabezado por el ex alcalde Francisco Tarazona, en el presupuesto del citado ejercicio.
El escrito del Síndic, fechado el pasado 20 de enero, certifica que el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria gobernado entonces por el PP realizó pagos por valor de 2'4 millones de euros que "no ha sido posible fiscalizar por esta Sindicatura al no haber aportado el ayuntamiento la documentación que acredite los pagos realizados", según asegura la entidad que añade que este importe "no ha tenido movimiento desde el ejercicio 2002, año en el que tuvo lugar un cambio de sistema contable".
El Síndic subraya, a reglón seguido, que "si bien la Intervención ha tratado de componer las operaciones que puedan constituir el saldo de dicha cuenta, no ha podido localizar la información y documentación suficiente para llevar a cabo una análisis de la misma y proponer las acciones correspondientes". Además, recuerda que un informe de fiscalización de la propia sindicatura del año 1999 "ya se puso de manifiesto la existencia de un saldo contable de pagos sin consignación por un importe similar al de 2014".
Sin embargo, el informe detalla otras irregularidades. Entre ellas, pagos pendientes de aplicación por otros 35.560 euros correspondientes del año 2002 y anteriores "de los que tampoco se dispone de información suficiente y adecuada de estos pagos, lo que supone una limitación al alcance de la fiscalización de esta Sindicatura". La revisión efectuada detecta que el ayuntamiento no incluye fondos de titularidad municipal por importe de 174.397 euros "confirmados por esta Sindicatura por cinco entidades bancarias cuyas cuentas no estaban canceladas a dicha fecha" así como la ausencia de un inventario general de bienes y derechos actualizado ni un inventario contable.
El análisis descubre que el presupuesto, la liquidación y la cuenta general del ejercicio de 2014 fueron aprobados "incumplen los plazos legales", además de que las cuentas generales correspondientes a los ejercicios desde los años 2000 a 2013 están pendientes de aprobar por el pleno, tal y como rige el actual ordenamiento jurídicos de las administraciones locales.
Por último, el Síndic de Comptes se centra en la concesión de las subvenciones del área de deportes al Club de Fútbol Riba-roja como uno de los motivos para enviar la documentación al Tribunal de Cuentas "por responsabilidad contable" al estimar que se conceden de forma directa "cuando deberían realizarse mediante el procedimiento ordinario en régimen de concurrencia competitiva".
El informe concluye que la subvención deportiva concedida mediante un convenio entre ambas partes cuyo objetivo "incumple con los requisitos de la ley y la fórmula de pago no se ajusta al ordenamiento jurídico por cuanto el pago se consumó el mismo día de la firma del convenio". Además, el PP dio por justificada la subvención en Junta de Gobierno mediante las facturas presentadas por la directiva del club a pesar de que "no cumplían los requisito, por lo que no debieron admitirse por el ayuntamiento".
El equipo de gobierno de Riba-roja de Túria, formado por el PSPV, Compromís y Esquerra Unida, ha afirmado que las conclusiones definitivas del Síndic tras las alegaciones municipales "son demoledoras sobre la gestión económica que llevó a cabo el Partido Popular en el presupuesto del año 2014 analizado detenidamente por este organismo y demuestran las sospechas que siempre despertó entre los partidos de la oposición y buena parte de la opinión pública local".
El ejecutivo local ha expresado "la predisposición y la colaboración que desde el actual equipo de gobierno hemos brindado al Síndic de Comptes a la hora de satisfacer todas las peticiones y necesidades de documentación exigidas para estudiar y analizar la gestión del PP durante el año 2014 y cuyas conclusiones suponen un enorme varapalo a la forma de trabajar que tenían el ex alcalde Francisco Tarazona y la actual portavoz popular María José Ruiz que formaba parte del núcleo duro del PP".