Riba-roja de Túria concluye el año con 74 parados menos y 14.641 contratos laborales registrados en total a lo largo de 2023
Un recorrido histórico en las cifras de Labora en Riba-roja constata el mes de diciembre pasado con 1.340 parados como el mejor de la última década
El año 2023 ha concluido en Riba-roja de Túria con 74 parados menos registrados entre enero y diciembre y con la formalización de 14.641 contratos laborales registrados a lo largo del citado periodo de tiempo en esta localidad. Los datos de Labora, organismo autonómico encargado de la formación y el empleo, constatan una mejoría en términos de creación de puestos de trabajo.
Las cifras de Labora determinan que entre enero y diciembre del pasado año 2023 se ha experimentado un descenso de 74 parados en Riba-roja de Túria, al pasar de 1.414 a 1.340 el número de parados entre ambos periodos. Los 1.340 desempleados de la actualidad se distribuyen en 520 hombres y 820 mujeres, frente a los 545 hombres y 869 mujeres existentes en el mes de enero del pasado año 2023.
De esta forma, el mes de diciembre pasado es el que menor volumen de parados se ha registrado en Riba-roja de Túria a lo largo de la última década con los citados 1.340 desempleados frente a los 2.279 existentes en el mes de diciembre de 2013 en la localidad. Desde entonces, la reducción del nivel de parados en el término municipal ha sido progresiva, con mejores datos que antes de la pandemia del covid del año 2020, cuando en el mismo mes de diciembre de 2019 se contabilizaron 1.527 desempleados.
De hecho, desde entonces los 1.527 parados pasaron a los 1.717 desempleados de diciembre en el año 2020 por el lastre ocasionado por la pandemia, a los que sucedieron los 1.538 desempleados que se registraron en las bases de datos de Labora, seguido de los 1.389 parados contabilizados en diciembre de 2022 y, finalmente, los 1.340 parados en diciembre pasado, es decir, 49 menos entre los dos últimos años.
Los demandantes de empleo en Riba-roja de Túria se estructuran en los 990 desempleados correspondientes al sector de los servicios, los 174 pertenecientes al sector de la industria, otros 107 demandantes del sector de la construcción y, finalmente, los 24 parados correspondientes a la agricultura en la localidad, además de los 4 parados que no están englobados en ningún sector de actividad en concreto.
Por secciones de actividad económica, los desempleados en Riba-roja de Túria se distribuyen en los 214 correspondientes a las actividades administrativas y servicios auxiliares, los 189 del comercio al por mayor y al por menor, la reparación de vehículos de motor y las motocicletas, los 158 de la industria manufacturera, los 119 desempleados pertenecientes a la administración pública y defensa, Seguridad Social obligatoria, los 114 de la hostelería y, finalmente, los 107 de la construcción.
En cuanto a los grupos de edad, los parados se estructuran entre las 507 mujeres mayores de 44 años, los 299 hombres en el mismo tramo de edad, las 261 mujeres de entre 25 y 44 años, los 164 hombres también de entre 25 y 44 años, los 57 hombres menores de 25 años y, finalmente, las 52 mujeres menores de 25 años. Los mayores de 44 años conforman el grupo más numeroso, con 806 personas sobre el volumen total.
Los datos de Labora publicados en sus últimos registros detallan el nivel de contratación experimentado en Riba-roja de Túria a lo largo del pasado ejercicio 2023 en el que se llegaron a formalizar un total de 14.641 contratos laborales en las empresas radicadas en su término municipal. En los doce meses de que consta el año, los meses de mayo, junio y julio fueron los meses en los que se registraron más contratos, con 1.364, 1.458 y 1.416 contratos, respectivamente, en la localidad.
El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, ha afirmado que estos datos “reafirman el camino emprendido en los últimos años en la creación de puestos de trabajo, especialmente, desde la irrupción de la pandemia del covid, con una mejoría notable en los últimos meses, y con los mejores datos conocidos a lo largo de la última década, sin olvidar la formalización de contratos laborales, en especial con un incremento del empleo indefinido notable desde la entrada en vigor de la última reforma laboral”.