Riba-roja recupera una zona verde de 12.500 metres cuadrados

El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha recuperado la zona verde que el Partido Popular alquiló a una empresa de restauración por un valor total de 1.200 euros al año para instalar un salón de banquetes, unas pistas de pádel y una zona de ocio. El administrador concursal ha acordado entregar al consistorio esta zona después de que la citada mercantil entrase el pasado año en concurso de acreedores.

La zona verde ocupa un área de 12.538 metros cuadrados de extensión situada en el polígono industrial El Oliveral de Riba-roja de Túria en virtud del acuerdo al que llegaron el anterior alcalde Francisco Tarazona, del PP, y el propietario del complejo de restauración Peñasol en diciembre de 1998. El contrato público establecía el pago de 1.200 euros -200.000 pesetas de la época- revisables anualmente con el índice de precios al consumo (IPC) para que la mercantil pudiese construir en la parcela zonas ajardinadas, deportivas y un anexo para ampliar el uso de restauración.

De esta forma, los propietarios del complejo deportivo y de restauración pudieron ampliar sus instalaciones con el alquiler de esta zona municipal por esa módica cantidad de dinero que significaba el pago de alrededor de 100 euros mensuales por el uso y disfrute de los 12.538 metros cuadrados gracias y que explotó gracias a su inmejorable ubicación junto a la autovía nacional III.

Sin embargo, el complejo cerró sus puertas al público el pasado mes de abril y se declaró en suspensión de pagos cuyo concurso de acreedores ha permitido al Ayuntamiento de Riba-roja de Túria recuperar una parcela de notables dimensiones y excelente ubicación geográfica para destinarla en un futuro a un uso público. Para ello, el administrador concursal ha decidido su devolución al consistorio después de que la Junta de Gobierno municipal acordase "la extinción de la concesión del uso privativo de la parcela" que en su momento rubricaron el ex alcalde del PP y los propietarios del complejo deportivo Peñasol.

A partir de ahora, el ayuntamiento procederá a la limpieza y adecuación de la parcela que ha sido recibida con múltiples desperfectos, algunas vallas derribadas, paredes y muros agrietados y algunas dependencias destruidas por el paso del tiempo y el abandono por parte de los anteriores inquilinos hasta el punto que será necesaria una inversión importante para su total recuperación y rehabilitación.

El equipo de gobierno ha lamentado el acuerdo que el PP y la empresa inquilina rubricaron en el año 1998 "por una parcela de dimensiones notables y por un precio que era absolutamente irrisorio y que permitió a la mercantil ampliar su abanico de negocio y, por tanto, aumentar de forma notable sus beneficios gracias a la benevolencia del antiguo gobierno del Partido Popular que con el dinero de todos los ciudadanos actuaba con enorme magnanimidad".

El ejecutivo local ha añadido que el consistorio "tendrá que asumir, además, una inversión económica considerable para devolver toda la parcela al estado anterior al alquiler ya que la hemos recibido con visibles desperfectos, problemas y numerosos derribos en las obras que en su momento se acometieron y que ahora deben ser restaurados por culpa de una gestión tan deficiente del Partido Popular".

Por último, el equipo de gobierno de Riba-roja de Túria ha querido subrayar "la conexión entre el convenio de alquiler que en su momento se rubricó y las habituales cenas de navidad y veraniegas que el ayuntamiento celebraba con todos los trabajadores en el complejo de restauración trufadas de precios fuera de mercado para las comidas y las cenas, deficiencias contables y posibles irregularidades ya de las mismas no se tenían constancia oficial en el departamento de intervención municipal; ahora se entiende que el PP acordase un precio módico por ocupar una extensión de terreno tan grande para hacer negocio una empresa privada de la que no se beneficiaba el municipio".