Los rastreadores valencianos, a la cabeza en España

La pandemia del coronavirus ha puesto de relieve muchas de las carencias que sufría el sistema sanitario español. La falta de medios, materiales y humanos, hicieron que los primeros meses de la pandemia fueran una asfixia continua para los hospitales de todo el país.

Ahora, en plena etapa de rebrotes y con las vacaciones de verano ya en marcha, es más necesario que nunca contar con profesionales de calidad que contribuyan a la nada fácil labor de contener los contagios. Son los conocidos como rastreadores: personal sanitario distribuido por toda España para detectar nuevos casos.

Su trabajo es vital para evitar nuevas olas de coronavirus. En la Comunitat Valenciana hay en estos momentos un total de 1.008 rastreadores según los datos facilitados por la conselleria de Sanidad. Una cifra que sitúa a la valenciana a la cabeza del resto de CCAA.

Le siguen Andalucía (450), Castilla la Mancha (427), Castilla León (312) y Cataluña (245). En la parte contraria de la lista, se encuentran comunidades como Asturias (30), Navarra (38), Cantabria (57) o Murcia (65).

Según estos cálculos, los 1.008 rastreadores valencianos suponen 10,1 por cada cien mil habitantes y son capaces de localizar por cada paciente que haya dado positivo en coronavirus a entre dos y seis personas con las que ha tenido contacto. Esto permite realizar un seguimiento del virus y evitar que siga propagándose.

El trabajo de un rastreador

Pero ¿en qué consiste el trabajo de un rastreador? Como bien dice su nombre, la labor es rastrear el recorrido que hace el coronavirus. El proceso comienza cuando se detecta un caso sospechoso. A partir de ese momento, los profesionales se ponen en contacto y le realizan una prueba PCR.

Tras ello, deben de realizar un listado con los datos de todas aquellas personas que han tenido contacto estrecho con el infectado. A ellos, también se les realiza una prueba y se les pone en cuarentena.