La residencia de tipología mixta de Quart de Poblet celebra su cuarto aniversario con ilusión, esperanza y sin Covid

Con ilusión, esperanza y extremando al máximo las medidas sanitarias contra la covid, los usuarios y profesionales del Centro de tipología mixta de Quart de Poblet han celebrado su cuarto aniversario.  Y lo pueden conmemorar orgullosos de cómo han gestionado la crisis sanitaria más importante de la historia reciente.   

Desde el Ayuntamiento de Quart de Poblet se han acordado de este día tan especial y han querido felicitar a usuarios y residentes por  “el esfuerzo realizado y el excelente funcionamiento de la Residencia durante este tiempo tan duro y difícil, lo que ha supuesto un éxito más que añadir al excelente currículo del Centro”. 

En toda la pandemia no ha habido un solo fallecimiento por Covid-19. Más aún, sólo ha habido dos casos asintomáticos entre los residentes, producidos a los pocos días de administrarse la primera dosis de la vacuna, y cuatro entre los profesionales.  María Rodríguez, directora del Centro, opina que el secreto ha sido mantener grupos burbuja muy estrictos y hacer un seguimiento exhaustivo de los contactos cuando había alguna sospecha. 

Pero no solo se ha cuidado hasta el límite la salud física de las personas sino también la psicológica: “Para mí ha sido un desafío profesional y personal. Hemos hecho todo lo posible para que estuvieran distraídos en todo momento. Nos hemos inventado de todo.”  

El trato humano ha sido tal que la Fundación Pilares ha otorgado al cocinero del Centro, David Vijuescas,  el  Premio al mejor relato en primera persona derivado de su experiencia durante la pandemia de la Covid-19. En el relato se pone en valor a todo el equipo de una residencia en el que cada uno del equipo profesional, sin distinción de categorías, junto a las personas mayores residentes, cumple un papel esencial. Cada día durante toda la pandemia escribía en un diario algún hecho bonito o característica agradable de un residente o trabajador. A ese diario del Centro mixto de Quart de Poblet lo tituló El Castillo.  

Este galardón se suma a otros que reconocen este proyecto como uno de los mejores de España. Hay que recordar que este centro es uno de los pocos que existen en la Comunidad de tipología mixta. Es decir, residencia para personas mayores, residencia para personas con diversidad funcional menores de 65 años y centro de día.  

Entre los y las usuarias, que algunas rozan los cien años, hay historias entrañables como la de un matrimonio al que no ha podido separar ni una pandemia. Visitación vive en la Residencia debido a su alzhéimer. Antes de que irrumpiera el coronavirus, Manolo iba todos los días a recoger a su mujer y paseaban juntos por Quart de Poblet.  El confinamiento les impidió seguir haciéndolo, pero Manolo ha acudido todos los días a ver a su mujer a través de la cristalera. Se comunicaban con un lenguaje único que solo ellos conocen tras toda una vida juntos. Ahora vuelven a dar paseos por el pueblo, van a la heladería, al parque y recuperan el tiempo que no pudieron estar juntos.  

El centro ha facilitado en todo momento el contacto diario con los familiares a través de videoconferencias, llamadas o whatsapp.  

Una de las actividades más esperadas en este cuarto aniversario ha sido la actuación de Juanjo Pérez, perteneciente a “Músicos por la salud”, una iniciativa  creada  para llevar apoyo a pacientes y a personal sanitario durante los meses más duros de la pandemia. Hasta hoy solo se conocían por las actuaciones que realizaban online. “Músicos por la salud” actuaba dos veces por semanas para los residentes del Centro de Quart de Poblet y, a muchos, ya los conocen por su nombre. 

Desde la residencia han querido que se conozcan personalmente personalmente y que les cante a los mayores las canciones de toda la vida que tanto les gustan y a los más jóvenes el repertorio de los años ochenta y noventa. 

Este aniversario lo pueden celebrar todos juntos pero separados por grupos burbuja. Estarán los 45 mayores residentes y los 26 menores de 65 años que tienen alguna diversidad funcional física. También se suman a la celebración los 15 usuarios del Centro de Día que, desde hace un mes, pueden acudir y reunirse con sus amigos.