Richard Techera presenta «Tormenta de sombras» en la Casa de Cultura
El 12 de mayo, Richard Techera presentaba su primera novela en la Casa de Cultura de Puçol: «Tormenta de sombras», editada por Círculo Rojo. Aunque es adicto a la lectura desde siempre y escribe desde que era un adolescente, su primera obra ha tardado tres décadas en ver la luz, porque el manuscrito quedó guardado en una carpeta hasta que llegó la pandemia y el autor lo rescató. Hablamos con el autor.
¿Desde cuándo llevas escribiendo?
Para mí, la escritura ha sido una extensión natural de mi gusto por la lectura, y la necesidad de expresar mis inquietudes.
Escribo desde mi adolescencia, aunque de forma intermitente, desde largas y recargadas felicitaciones navideñas, hasta numerosos relatos de ficción, algunos con tramas bastante truculentas.
Sobre todo, narrativa, aunque he escrito algo de poesía y letras de canciones que nunca han visto la luz.
¿Cuánto tiempo te ha llevado escribir esta obra?
Pues apenas treinta años; me explico: escribí la novela a principios de los años noventa; de hecho, aunque tiene forma de novela corta, en realidad es un ensayo, el esqueleto de una novela más extensa, escrito con la intención de mantener vivo el argumento.
Dejé el manuscrito olvidado en una carpeta hasta que hace tres años, en la pandemia, la revisé con ayuda de mi marido para corregir, cambiar expresiones y conceptos y refrescarla.
Continuó en un cajón hasta hace unos meses cuando lo envié para ser evaluado por Círculo Rojo.
¿Qué es lo que destacarías de tu libro?
La capacidad de introducir al lector en la trama fusionando las emociones de los personajes con las circunstancias de la historia.
¿A quién va dirigido?
A toda persona con una mentalidad abierta; su contenido es transgresor por momentos, a veces duro, una historia transversal que pone a prueba los convencionalismos éticos.
¿Qué te ha inspirado para escribirla?
Desde muy joven me he deleitado con la lectura; en algún momento en edad escolar me impresionó mucho una serie de cuentos del escritor uruguayo Horacio Quiroga, cuyo estilo descriptivo, su prosa y narrativa, me impulsaron a crear relatos enfocados al dinamismo y las emociones. En ese torbellino se fue forjando esta historia.
¿Qué se va a encontrar el lector en tu obra?
Probablemente se vea envuelto en una historia que le atrapará casi desde el principio, involucrándole en las vicisitudes de los personajes y haciéndole empatizar con ellos en un vaivén de emociones que le acompañará hasta el final.
¿Cuál ha sido tu impresión sobre la gestión por parte de la Casa de la Cultura de Puçol?
Debo decir que, en estos tiempos de escepticismo contra las instituciones y el funcionariado en general, me ha sorprendido el gran apoyo y eficacia tanto del Ayuntamiento como la Casa de Cultura y la propia concejalía de Cultura, ya que he acudido a todos esos sitios con diferentes peticiones relacionadas con la presentación de mi libro y me han brindado las mejores prestaciones. Mi experiencia ha sido altamente satisfactoria.
