Cae una narcofamilia en Picassent: seis detenidos tras desmantelar un búnker de droga con sistema de seguridad y desagüe para "emergencias"
Llama la atención como intenta deshacerse de la droga la matriarca de la familia
Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un punto negro de venta de sustancia estupefaciente en la localidad valenciana de Picassent y han detenido a seis miembros de una misma familia, cinco hombres y una mujer, de entre 19 y 52 años, de origen español, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas.
Los arrestados se habían instalado en un edificio de este municipio valenciano, adquiriendo la totalidad de las viviendas y adaptándolo a las necesidades de su comercio ilegal de sustancias estupefacientes. Concretamente, para acceder a las escaleras del mismo había que atravesar una cancela, a través de la que realizaban las ventas de droga al menudeo con seguridad y rapidez. También disponían de una reja trasera oculta en el inmueble para hacer el pase de la sustancia a los compradores y contaban con un sistema de cámaras de seguridad, dificultando así una posible intervención policial.
Los investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia comprobaron que existía un trasiego de compradores de droga en el citado inmueble. Tras varias pesquisas, los agentes, junto a Guías Caninos y la Unidad de Intervención Policial, registraron el edificio sospechoso así como otro ubicado en la misma localidad, también propiedad de los ahora detenidos. En total, intervinieron 161 plantas de marihuana, con un peso de unos ocho kilos; 107 gramos de cocaína divididos en 156 dosis; 109 de marihuana distribuida en 64 dosis; 9.350 euros en efectivo, una báscula de precisión y útiles para elaborar las dosis de droga; nueve defensas extensibles y dos eléctricas.
Un desagüe para deshacerse de la droga
Los agentes comprobaron, además, que en el edificio objeto de la investigación existía un desagüe de gran tamaño en el patio interior de la vivienda principal, a través del que una de las sospechosas intentó deshacerse de gran parte de la sustancia estupefaciente ante la llegada de los policías, arrojando cubos de agua que tenía preparados. No obstante, no consiguió su objetivo, logrando los agentes rescatar gran parte de las dosis.
La operación policial culminó con la detención de seis miembros de una misma familia como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. De los arrestados, cinco tienen antecedentes policiales y cuatro han pasado a disposición judicial.